La violencia y los crímenes en Rosario no paran. En la tarde de este miércoles, una mujer fue asesinada a tiros en la zona oeste al salir de una visita en la cárcel ubicada en el límite con la ciudad de Pérez. En otro ataque, ocurrido cuatro horas después en el distrito norte, mataron a dos jóvenes cerca de un kiosco del distrito norte. En el hecho además resultaron heridos un nene de 9 años –está en estado crítico– y otro hombre de 28 años. Las dos investigaciones son llevadas adelante por el fiscal Alejandro Ferlazzo y la División de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal.
Los números hablan por sí solos. En lo que va del año, contando estos tres casos, ya hubo 194 homicidios dolosos en el departamento Rosario, según datos del Observatorio de Seguridad Pública. Fueron tantos los asesinatos ocurridos durante el turno de fiscal Ferlazzo (once en una semana) que desde el Ministerio Público de la Acusación informaron este jueves que serán redistribuidas algunas de las causas de los crímenes dentro de la unidad para que todos los fiscales tengan una cantidad similar de casos.
El primer asesinato de este miércoles ocurrió en Uriburu al 6000. Victoria Soledad Páez (de 26 años) y Jaquelina Ruiz Díaz (37) fueron atacadas desde un auto mientras circulaban en una moto Honda XR 150. La joven conductora murió en el acto, mientras que la acompañante terminó internada en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez con cuatro heridas de arma de fuego en el abdomen y dos en el brazo izquierdo. En la escena, se incautaron 12 vainas servidas calibre 9 milímetros.
Cuando se comenzaron a hacer tareas para intentar establecer hipótesis sobre el motivo del ataque, se llegó al dato de que Jaquelina tiene domicilio en el barrio Coronel Aguirre de la vecina ciudad de Villa Gobernador Gálvez. Esa casa figura en al menos cuatro reportes policiales desde 2020 por haber sido baleada. En uno de esos ataques incluso mataron a un pariente, César Manuel “Noni” Ruiz Díaz, quien fue acribillado el 11 de octubre de aquel año.
De acuerdo a investigadores policiales, la familia de Jaquelina es conocida como “La banda de los hormiguitas” y se dedicaría a la comercialización de droga en Villa Gobernador Gálvez.
Cuatro horas más tarde, cuando el gabinete científico de la Policía provincial se iba de la escena del homicidio de Páez, tuvo lugar un doble crimen en barrio Casiano Casas, en la zona norte de Rosario. Según el relato de testigos ante los medios locales, pasaron dos motos y dispararon contra un grupo de personas que estaba en inmediaciones de un quiosco. En el lugar, la Policía secuestró 18 vainas calibre 9 milímetros.
“Los que mataron son de acá a la vuelta. Los conocemos. Se escucharon tantos tiros que no llegamos ni a contarlos”, comentó una vecina a Radio 2 en la mañana de este jueves.
El doble homicidio ocurrió en Cavia y Gallardo, en una villa de emergencia en la que hay varios búnkeres, algunos de ellos, de la vieja banda del asesinado Emanuel “Ema Pimpi” Sandoval, único condenado por el atentado a tiros contra la casa del ex gobernador Antonio Bonfatti.
Las víctimas fatales de la balacera fueron Kevin Gabriel Mora y Nahuel Lionel Segovia, ambos de 25 años. Cerca de ellos, pero haciendo una compra en el kiosco, estaba un nene de 9 que recibió tiros en la espalda y en una pierna. Está internado con pronóstico reservado en el hospital de Niños Zona Norte-
También fue herido Mauricio Emanuel M., de 28 años, que ingresó al HECA con impactos en el tórax, brazo derecho y cráneo. Su pronóstico también es reservado.
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