El próximo 10 de noviembre, y a puertas cerradas, comenzará el juicio por el crimen de Lucio Dupuy, el niño de 5 años abusado sexualmente y asesinado a golpes en la ciudad pampeana de Santa Rosa. En el banquillo de los acusados estará a la madre del nene y a la pareja de la mujer, y no se permitirá el ingreso al público ya que la víctima era menor de edad y se debate un delito contra la integridad sexual.
Fuentes judiciales informaron este martes que el juicio estará a cargo del tribunal pampeano integrado por los jueces Aníbal Olié, Alejandra Ongaro y Daniel Sáez Zamora, mientras que los fiscales que impulsarán la acusación, que tiene una pena en expectativa a perpetua, del Ministerio Público serán Walter Martos, Verónica Ferrero y Marcos Sacco. Está previsto que el debate finalice el 22 de diciembre.
Durante el juicio declararán unos 60 testigos y aún no está definido si Magdalena Espósito Valenti, madre de Lucio, y su pareja, Abigail Páez, ambas acusadas por el crimen, estarán presentes. Las dos permanecen alojadas en en el complejo Penitenciario N°1 de la provincia de San Luis.
La causa fue elevada a juicio en junio pasado luego de una investigación que demandó seis meses y que estuvo a cargo de un equipo de instructores judiciales. “Creemos que las pruebas que hemos reunido son suficientes para acreditar estos delitos“, sostuvo la fiscal Ferrero en la conferencia de prensa en la que se informó sobre el final de la etapa de instrucción.
Según la investigación, Espósito Valenti (24) será juzgada por el delito de “homicidio triplemente calificado por el vínculo y con ensañamiento y alevosía; en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante por su duración y formas concretas de realización, triplemente agravado por ser la guardadora al momento de los hechos, por ser cometido por dos personas y por existir convivencia con la víctima menor de 18 años, como delito continuado”.
Mientras que a Páez (27) llegará al juicio imputada del delito de “homicidio doblemente agravado, por ser con ensañamiento y alevosía; en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante por su duración y formas concretas de realización, triplemente agravado por ser la guardadora al momento de los hechos, por ser cometido por dos personas y por existir convivencia con la víctima menor de 18 años, como delito continuado”.
La última pericia psicológica y psiquiátrica realizada a ambas determinó que son personas imputables y comprenden la criminalidad de sus acciones y sus actos. El informe también determinó que las dos cuentan con ciertos rasgos de personalidad perversa.
El crimen de Lucio, ocurrido el 26 de noviembre pasado, generó conmoción más allá de los límites de La Pampa. El chico murió a raíz de una golpiza que sufrió en la casa donde vivía junto a su madre y la pareja de la mujer, quienes quedaron detenidas de inmediato.
En febrero de 2022, el Ministerio Público Fiscal amplió la imputación de ambas y al original delito de homicidio que les endilgaban le sumaron el de abuso sexual triplemente agravado.
Tras la trágica muerte de Lucio se determinó que el niño había sido asistido, al menos, cinco veces, en un lapso de tres meses, por politraumatismos en distintos centros asistenciales de La Pampa, aunque no había denuncias de los profesionales que lo atendieron, como así tampoco de las autoridades del jardín de infantes al que asistía.
Por tal motivo se inició una investigación administrativa a nivel gubernamental para establecer responsabilidades de funcionarios en la omisión de denuncias que pudieron haber evitado este desenlace.
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