La violencia en Rosario no cesa. En las últimas horas, atacaron a balazos a un joven de 21 años desde un vehículo en la zona del barrio Santa Lucía. Según lo informado por fuentes policiales, la víctima murió en el acto. Con este crimen, la triste cifra de homicidios en esa ciudad santafesina trepó a 178 casos en este 2022, según el observatorio de seguridad pública. En lo que va del año, se cometió un crimen cada 30 horas.
El ataque ocurrió este sábado cerca de las 22, y la víctima, identificada como Uriel Alejandro Cantero, nada tiene que ver con la terrible familia Cantero que domina la banda narco Los Monos, así lo aclararon fuentes de la investigación de Infobae.
Uriel Cantero, que el 20 de agosto hubiera cumplido los 22 años, se encontraba en un pasillo del pasaje 1746 al 2.100 del barrio Santa Lucia, en la zona Oeste de Rosario, muy cerca de su casa, cuando un auto se acercó y desde el interior comenzaron a dispararle. Tras el ataque, los agresores se dieron a la fuga.
Los vecinos llamaron al 911 y, cuando la Policía llegó al lugar, se constató la muerte de Cantero, quien yacía sobre el piso y con múltiples heridas de balas en varias partes del cuerpo.
En base con lo que declararon los vecinos que presenciaron el ataque, los asesinos de Cantero serían cuatro. Por lo pronto, en la escena del crimen los policías hallaron seis vainas servidas y un plomo deformado. La investigación está a cargo del fiscal de turno en la Unidad de Homicidios Dolosos, Ademar Bianchini, quien ya ordenó una serie de diligencias para poder identificar y dar con los homicidas.
El crimen de este joven ocurrido en las últimas horas no es un hecho aislado. Rosario se encuentra sumida en una escalada de violencia, atravesada por el narcotráfico. Aunque, para el intendente Pablo Javkin, deteniendo a los jefes de las bandas narcos no se termina con la violencia: existe lo denominado “home office desde la cárcel”, que le permite a los criminales seguir cometiendo delitos aún privados de su libertad.
Es tal la problemática que sufre Rosario que el ex ministro de Seguridad santafesino Jorge Lagna renunció a su cargo a pedido del gobernador Omar Perotti, al igual que la ahora ex Jefa de la Policía Emilse Chimenti. En sus lugares fueron designados Rubén Rimoldi, un comisario General retirado que asumió el pasado 11 de agosto; y Miguel Ángel Oliva, respectivamente.
La determinación de que Lagna no siga en el cargo fue dada a conocer después de una reunión de urgencia que tuvieron el Gobernador, el ministro saliente y el titular de la cartera de Gestión Pública, Marcos Corach, en la sede de Rosario que tiene Gobernación.
Resulta que Rimoldi, de 61 años y retirado de la Fuerza es el tercer ministro de Seguridad del Gobierno de Perotti, que inició su mandato en diciembre de 2019 con Marcelo Saín, quien en marzo de 2021 fue reemplazado por Jorge Lagna hasta su renuncia.
“Las políticas de seguridad que se venían llevando a cabo continuarán de la misma manera”, manifestó Rimoldi durante la conferencia de prensa tras asumir el cargo, pero aclaró que “volverá a poner a la Policía en la calle”.
Y continuó: “Vamos a reestructurar los cuadros para que en los lugares más álgidos, en los lugares donde verdaderamente tenemos ese problema de la falta de seguridad, estemos presente a partir del tiempo que sea necesario en rapidez”.
SEGUIR LEYENDO: