La sucesión de hechos violentos en Rosario no se detiene y obligaron al gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, a reemplazar a su ministro de Seguridad provincial (en las últimas horas asumió en el cargo Rubén Rimoldi). En este marco, el intendente de la ciudad santafecina, Pablo Javkin, advirtió que la ola de inseguridad “empieza a pasar con mucha claridad y la misma modalidad en el Conurbano y en algunos sectores de la Capital (Federal) también”.
El jefe comunal atribuyó esta preocupante situación a la falta de presencia policial en los lugares más calientes de la ciudad. “Quienes deben cuidarnos, no nos cuidan. No tenemos presencia aún en los territorios donde sabemos que hay que tenerla en forma urgente”, aseguró hoy durante una entrevista para FM Delta 90.3.
Con el objetivo de justificar su conclusión, Javkin se apoyó en el caso puntual del barrio Ludueña, uno de los puntos de Rosario en los que se registraron más más hechos de violencia e inseguridad en lo que va del 2022. “En barrio Ludueña llevamos 22 homicidios y 56 heridos de arma de fuego en lo que va del año, concentrados en cuatro puntos”, puntualizó, y lamentó: “La Gendarmería tiene una presencia que permite que se mate gente en su cara. Esa situación es la que harta”.
Para el jefe comunal de Rosario hay dos factores que hacen que los ciudadanos no puedan sentirse seguros en su propia ciudad. “Las personas que están detenidas y ordenan crímenes para sostener su peso territorial, y la desaparición de la fuerza en la calle”. “Hay que darle un corte”, sostuvo.
Sobre la designación de Rimoldi a cargo del Ministerio de Seguridad santafesino, Javkin deseó “que le vaya bien” y dijo que espera “tener respuestas” que con los funcionarios anteriores no conseguía.
“La droga y las armas no salen del subsuelo de Rosario, llegan”, planteó, y sugirió que esta realidad podría vivirse en la provincia de Buenos Aires. “Por ejemplo, la consolidación del fenómeno de la villa 1-11-14″, puntualizó. “Cuando uno va descabezando bandas, la disputa territorial se hace más violenta. El descabezamiento no termina en que los jefes dejen de delinquir, porque lo hacen con toda comodidad haciendo home office desde la cárcel”, concluyó el intendente rosarino.
Ayer, Rubén Rimoldi fue presentado como flamante titular de la cartera de Seguridad santafesina y, como una de sus primeras medidas, adelantó que “volverá a poner la policía en la calle”. “Las políticas de seguridad que se venían llevando a cabo continuarán de la misma manera”, manifestó Rimoldi, quien asume en reemplazo de Jorge Lagna, luego de que el gobernador Omar Perotti le pidiera la renuncia en medio de la ola de homicidios que azota a Rosario.
“Vamos a reestructurar los cuadros para que en los lugares más álgidos, en los lugares donde verdaderamente tenemos ese problema de la falta de seguridad, estemos presente a partir del tiempo que sea necesario en rapidez”, declaró Rimoldi, en el acto de asunción que se llevó a cabo en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno de Santa Fe.
En tanto, el gobernador Perotti se manifestó a través de sus redes sociales: “Comenzamos una nueva etapa, en un momento complejo que tiene la Provincia de Santa Fe, con acciones concretas en el territorio: con más tecnología, más equipamiento y más presencia. Pocas palabras y más trabajo”.
Rimoldi, de 61 años, es un comisario general que se retiró de la actividad en 2008, luego de haber pasado por Seguridad Vial, Inteligencia e Investigación Criminal, Operaciones policiales, Armas y explosivos, y la jefatura de la Policía del departamento Caseros. Fue secretario de Seguridad Ciudadana del municipio de Casilda, de donde es oriundo, fue asesor de seguridad de la Liga Casildense de fútbol y de la Federación de Automovilismo de Santa Fe. Actualmente, era asesor en Seguridad Pública de la Municipalidad de Las Parejas.
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