Un policía estuvo tres años preso por tentativa de homicidio pero un jurado lo declaró inocente

Un cabo primero de la Policía Federal recuperó su libertad tras haber permanecido preso durante 3 años por tentativa de homicidio. El agente había sido acusado por un hombre de 64 años de haberlo agredido hasta dejarlo inconsciente. Por ese motivo se encontraba privado de su libertad. Sin embargo, un jurado popular decidió declararlo inocente, ya que durante el juicio su suegra confesó haber sido ella quien atacó al denunciante, a quien acusó de haber querido abusarla sexualmente.

El hecho ocurrió el 11 de febrero del 2019, en una vivienda de Sucre al 100, en Florencio Varela, provincia de Buenos Aires. Allí vivía Víctor Golobarda, un hombre con problemas de movilidad. De acuerdo a la investigación inicial, tras una discusión entre varias personas, el sexagenario recibió una golpiza en la cabeza propinado con un objeto contundente y quedó en grave estado, por lo que fue trasladado a un hospital de la zona.

Golobarda permaneció internado unos 40 días hasta que recobró la conciencia. Al hacerlo, pudo declarar y afirmó que había sido atacado por el policía Figueroa, por lo que en mayo de ese año ese fue detenido.

Sin embargo, el cabo primero siempre se declaró inocente, a pesar de lo cual fue pasado a disponibilidad por Asuntos Internos de la PFA hasta que culminara el proceso. Su abogada, en tanto, requirió al tribunal que el hecho sea dirimido por un jurado popular.

Durante la instrucción del caso, la suegra del policía declaró como testigo y reconoció que en realidad había sido ella quien cometió el ataque debido a que Golobarda había intentado abusarla sexualmente.

“La mujer fue a la casa del hombre a tomar mates y encontró la puerta de la casa entreabierta. Él le dijo que entrara y lo encontró en el piso del dormitorio porque se había caído, lo levanta para subirlo a la cama y ahí se dio cuenta que estaba desnudo e intentó sobrepasarse”, afirmó la abogada Romero.

De acuerdo al testimonio que repitió ante el jurado, ella tomó un objeto contundente que no recordó cuál era, con el que lo golpeó varias veces en el cráneo.

“Lo único que recuerda por intervalos es que se fue de la casa y caminó hasta la suya que está en el barrio Villa del Plata, a unas 15 cuadras, y llegó con su ropa ensangrentada que tiró a la basura”, indicó la letrada sobre el relato.

Luego del hecho, la mujer guardó silencio ante el resto de sus familiares “por temor a dejar solas a sus hijas” y contó que su vida continuó de manera “normal”, aunque sufrió “pesadillas y ataques de pánicos”. Actualmente está bajo tratamiento psicológico.

Golobarda se recuperó del ataque y señaló que había sido el policía Figueroa -yerno de la mujer- el autor del hecho, tras lo cual la Justicia dispuso se detención y desechó la versión de la suegra porque creyó que era un intento para desviar la investigación.

Sin embargo, al escuchar este testimonio y otras pruebas, el jurado popular pasó a deliberar y decidió que el policía era “no culpable”, por lo que el juez Sequeiros lo otorgó la libertad inmediata.

El policía es Sergio Ariel Figueroa, quien fue recuperó su libertad por orden del juez técnico Raúl Sequeiros, del Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Florencio Varela, tras ser declarado “no culpable” por los doce jurados populares y fue reincorporado a su puesto en la Delegación Chascomús de la Policía Federal, según informó Télam.

Cabe recordar que el efectivo llegó detenido al juicio por el delito de “homicidio en grado de tentativa” y estuvo representado por la abogada Cecilia Lara Romero, quien en su alegato solicitó la absolución, mientras que la fiscalía pidió un veredicto de culpabilidad.

“Ella realizó la denuncia por el intento de abuso sexual de Golobarda pero la causa fue archivada”, concluyó la abogada Lara Romero.

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