Efectivos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires persiguieron y detuvieron en las últimas horas a un delincuente que quiso robarle el auto a un hombre en el barrio porteño de Villa Lugano. En medio del robo, que quedó registrado por las cámaras de seguridad, el ladrón forcejeó con el dueño del vehículo, disparó y huyó al ver la llegar un patrullero. Fue capturado a las pocas cuadras.
El violento episodio ocurrió anoche en la calle Rucci al 3300. De acuerdo con las imágenes a las que accedió Infobae, se observa primero cómo un hombre intentó subirse a su Volkswagen Bora de color negro hasta que de repente fue abordado por un delincuente armado, cuya intención fue llevarse el vehículo. Sin embargo, el propietario reaccionó inmediatamente y pese a que el ladrón le exhibió una pistola, se arrojó sobre él y comenzó a forcejear. No estaba dispuesto a dejar que se llevara el auto.
En ese momento, ambos se trenzaron en un breve enfrentamiento. La víctima tomó con fuerza la pierna del delincuente, se arrastró unos cuantos metros sobre la vereda hasta que apareció en escena una mujer, quien trató de intervenir para asistir al dueño del Bora. Fue entonces que la tensión subió a su nivel máximo: el ladrón se alejó un poco más, en plena calle Rucci, y le apuntó a la cabeza a la pareja del hombre. Segundos después, para amedrentar todavía más a las víctimas, efectuó varios disparos al asfalto.
Cuando pretendía cumplir su objetivo, todo cambió. El sospechoso observó cómo se acercaba un móvil de la Policía y escapó sin duda. Las víctimas le señalaron a los efectivos porteños a dónde ir para dar con el ladrón y a partir de ahí comenzó una breve pero intensa persecución. Ese fue el final de video, aunque la secuencia se extendió por algunas cuadras más.
De acuerdo con fuentes policiales consultadas por Infobae, personal de la Comisaría Vecinal 8A siguió al delincuente armado, quien gatilló tres veces contra a los uniformados cuando veía que se aproximaban. Sin embargo, el arma se le trabó. Al llegar al cruce de Zuviría y Herrera, se sumó al operativo otro oficial que intentó interceptar al ladrón con un golpe con la tonfa. Pero el delincuente volvió a gatillar porque no tenía intención alguna de dejarse atrapar. Pero el arma nuevamente falló y el tiro no salió.
La persecución se traslado al interior de Ciudad Oculta, donde el ladrón, un joven de 28 años, fue finalmente detenido. En su poder se incautó una pistola calibre 45, con una munición en la recámara, un cargador con seis proyectiles y una bolsa de nylon con otras 16 municiones.
El juzgado Nacional Criminal y Correccional 7, a cargo de la jueza Paula Verónica González, dispuso la detención del imputado y el secuestro del arma y los proyectiles, en el marco de la causa calificada como robo a mano armada, portación de arma de guerra y tentativa de homicidio. De acuerdo con las fuentes consultadas por este medio, el delincuente fue identificado como Jonathan Bustos, argentino, sin antecedentes y con en Villa Lugano.
SEGUIR LEYENDO: