Julio César Bibbo no es un desconocido para la Justicia marplatense, tampoco para las autoridades del Servicio Penitenciario Bonaerense. El hombre de 21 años, ahora detenido y acusado de ser al autor material del asesinato a cuchillazos de Martin Mora Negretti en Mar del Plata, tiene varios antecedentes. Ninguno tan grave como el que protagonizó el domingo, pero de todas maneras su prontuario es extenso: tuvo causas previas por robo, hurto y amenazas.
Según pudo conocer Infobae de fuentes oficiales, su último ingreso fue el año pasado, en una causa por robo. El tío de los adolescentes arrestados en el caso entró a la cárcel de Batán el 11 de marzo del año pasado. Allí permaneció hasta el 10 de enero de este año, cuando el Juzgado de Garantías N°6 de Mar del Plata le otorgó la libertad por haber cumplido la pena. Tardó solo cinco meses en volver a quedar detenido.
Según la reconstrucción que logró hacer el fiscal del fuero de responsabilidad penal juvenil, Marcelo Yáñez Urrutia, Martín Mora caminaba por la calle Sarmiento, junto a su novia y una pareja amiga, cerca de la 1.50 de la madrugada del domingo pasado. Habían salido de un bar de al zona, donde festejaron el cumpleaños de Martín. Estaban buscando una parada para tomarse el colectivo.
Si bien Mora Negretti vivía en la Ciudad de Buenos Aires, en Belgrano, conocía la zona porque era oriundo de Mar del Plata.
Según los testimonios recabados en el expediente, cuando estaban ya en la parada de la calle Sarmiento vieron cómo desde el séptimo piso de un edificio les arrojaban bolsas con hielo en el interior. Tanto Martín como su amigo Bruno Valle, también de 30 años, comenzaron a recriminar esa actitud.
“Fueron pocos segundos, les pedimos que dejen de tirar porque nos iban a lastimar”, declaró Bruno ante el fiscal. La recriminación, y los insultos iban dirigidos puntualmente a la única mujer mayor de edad que se asomaba del balcón. Era Marílyn Brisa Vera González, que comenzó a cruzar insultos con Martín y Bruno.
En medio de ese cruce de palabras, la mujer de 23 años gritó: “Ahora cuando vuelva mi marido, vas a ver”. Se refería a Bibbo, que minutos antes había salido a un kiosko.
Todo pareció calmarse por unos minutos hasta que, evidentemente y según creen los investigadores, Bibbo volvió al departamento, se enteró de la situación y decidió bajar dispuesto a asesinar. Lo acompañaron su novia y dos de sus sobrinos, de sólo 13 años.
Exactamente a la 1.50, según el registro de las cámaras de seguridad, todos descendieron del departamento “C” del séptimo piso del edificio ubicado en Sarmiento 2688. Al menos dos de ellos, llevaban en sus cinturones cuchillos, tipo facas.
Según creen en la fiscalía, entre los cuatro atacaron a Mora Negretti y lo apuñalaron seis veces. La hipótesis más firme es que quien realizó el ataque mortal fue Bibbo.
Luego de dejar a Martín mal herido, la mujer del grupo, Vera González, le robó el celular a la novia de la víctima y todos ingresaron nuevamente al edificio.
Cuando la policía llegó al lugar, en la madrugada de ese domingo, detuvieron a los menores y a la mujer, Bibbo se había escapado. Los cuchillos con los que se cometió el crimen, nunca se encontraron.
Recién en las primeras horas de la tarde de ayer lunes, la Justicia encontró y detuvo a Bibbo. Para eso fue fundamental el testimonio que dieron sus propios sobrinos de 13 años. Se declararon inocentes y apuntaron a su tío: “Nos divertía el ruido que hacían las cosas cuando caían al piso. Nosotros bajamos detrás de nuestro tío y la novia, los seguimos a ellos”, fue lo que dijeron en la Justicia de menores.
Además de su último ingreso a Batán, el ahora acusado del asesinato tiene otros ingresos recientes. Entre enero y marzo del 2019 estuvo detenido bajo domiciliaria en una causa por amenazas contra una ex novia. Como violó ese beneficio, lo enviaron a terminar de cumplir la pena en Batán. De allí salió en junio de ese año.
Menos de un año después, en mayo del 2020, volvió a ingresar a una cárcel provincial. Está vez fue por robar en un comercio. Estuvo detenido desde mayo hasta julio de ese año.
Esta mañana, el acusado se presentó frente al fiscal Arévalo para declarar. En tanto su novia, Marílyn Brisa Vera González, fue imputada como co-autora del hecho y pidió ser excarcelada porque tiene un hijo a quien cuidar.
SEGUIR LEYENDO: