El presunto jefe de la barra brava de Newell´s, Alejandro Nicolás “Rengo” F. y que tiene vínculos con el líder de Los Monos ‘Guille’ Cantero, y otros cuatro de sus lugartenientes fueron detenidos en allanamientos realizados este jueves en el Gran Rosario. Todos cayeron en el marco de la causa por el crimen de Nelson “Chivo” Saravia, ex referente del paravalanchas acribillado a tiros en su casa por un grupo comando hace ocho meses.
Además, también se requisaron las celdas de dos presos que, al momento del homicidio del “Chivo”, estaban en libertad y habían participado en el plan para concretar la emboscada. Y quedaron vinculados a la investigación; mientras que el cabecilla Guillermo “Chupa” u “Ojitos” Sosa ya estaba preso por haber instigado el homicidio de Saravia en el marco de una disputa por el dominio del paravalanchas.
Alejandro “Rengo” F., Jonatan Ezequiel B., Juan Manuel A., Kevin Nahuel J. y Pablo Damián G. cayeron en los 14 procedimientos que solicitó la Agencia de Criminalidad Organizada a la División de Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) que, en algunos operativos, requirió de la colaboración de Gendarmería.
El “descabezamiento” que se hizo a la barrabrava este jueves no fue al azar, ya que investigadores indicaron que se buscó que sea antes de que Newell’s reciba a San Lorenzo en el Coloso Marcelo Bielsa, donde el local jugará su primer partido en casa en este torneo.
“Rengo” fue arrestado por la madrugada en su casa de Belgrano al 100, en jurisdicción de la localidad de Piñero, vecina a Rosario. Tiene 29 años y, de acuerdo a la investigación del fiscal Matías Edery, es “la cara” visible de Ariel Máximo “Guille” Cantero en la barra brava de Newell’s. Cuestión para nada menor, ya que se considera que el jefe del clan narco es el mandamás del paravalanchas e imparte directivas desde el penal federal de Marcos Paz.
El ahora detenido y, presuntamente, ligado a “Guille” Cantero ya cuenta con antecedentes penales. El 29 de octubre de 2020 fue imputado por la fiscal Valeria Haurigot por amenazas coactivas, quien además le pidió 60 días de prisión preventiva, sin embargo, en ese entonces la jueza Eleonora Verón le dio la libertad bajo reglas de conducta.
Sumado a las cinco detenciones se revisaron las celdas de los reclusos Alexis Brian D. y Esteban Salvador A., sospechados como parte del grupo que perpetró el brutal asesinato del “Chivo”.
El resto de los procedimientos se hicieron en Nicaragua al 2.700, Pasaje 1748 al 2.100, Laplace al 1.300, Pasaje Magnano al 6.200, Alice al 5.000, Pasaje María Madre al 3.900, Garibaldi al 3.300, Centeno al 2.600, Pasaje 1229 al 2.600 y Rodríguez al 4.000. También hubo otros en Sarmiento al 1.200, localidad de Fray Luis Beltrán, Pasaje Gallini al 2.400 y San Martín al 2.800, en la ciudad de Villa Gobernador Gálvez.
Un cabecilla preso por el crimen
La causa ya había cobrado impulso a principios de mayo pasado, cuando fue capturado Guillermo “Chupa” u “Ojitos” Sosa, uno de los cabecillas de la barra brava. Cuando fue la audiencia imputativa, el fiscal Matías Edery explicó que había instigado el homicidio de Saravia y agregó que el ataque se enmarcó dentro de una disputa por el control del paravalanchas de Newell’s.
En esa audiencia, el fiscal expresó que la barra de Newell’s está comandada por Ariel Máximo “Guille” Cantero y por cinco subestructuras que trabajan para él.
Todas esas “células” son lideradas por integrantes de Los Monos que están presos: Leandro “Pollo” Vinardi –condenado por un crimen e imputado como miembro de la banda–; Pablo Nicolás Camino –también acusado por ser parte de la organización–; Marcos Jeremías “Pato” Mac Caddon –preso por regentear el narcotráfico en el cordón industrial de San Lorenzo en nombre de Los Monos– y Damián “Toro” Escobar, imputado por planificar el crimen del casino City Center, a comienzos de 2021.
En el caso de Guillermo Sosa, quien fue acusado el pasado mes, lo ubicaron como un presunto integrante de la “célula” que dirige el “Pollo” Vinardi, que opera principalmente en Villa Gobernador Gálvez.
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