Cuando Maximiliano P. (36) volvió a su casa e ingresó en su silla de ruedas, se encontró con un escenario de absoluta violencia. Su pareja, Celeste C. (40) se abalanzó sobre él con un cuchillo y lo hirió en el cuello y su brazo izquierdo, según pudo reconstruir Infobae a partir de fuentes judiciales.
“¡Te voy a matar, te voy a abrir todo!”, le habría gritado ella segundos antes de atacar e intentar lastimarlo, tal como señaló el hombre en su primera declaración.
Todo ocurrió alrededor de las 23 del último lunes en el cruce de calle 6 y Almirante Brown, en una zona de modestas casas en la localidad bonaerense de Punta Lara, partido de Ensenada. Aquella noche, los vecinos salvaron al hombre cuando llamaron al 911 alertados por la situación que se registraba en el domicilio.
Cuando los efectivos de la Comisaría 2° llegaron, encontraron a la mujer a pocos metros del domicilio y amenazando de muerte por medio de gritos a la víctima. Luego, el personal policial le solicitó a la agresora que exhibiera sus pertenencias y fue entonces cuando se le cayó de la manga izquierda de la campera un cuchillo de mango de madera. El arma blanca de 17 centímetros fue secuestrada y ella aprehendida.
Celeste C. se negó a declarar ayer y se encuentra detenida por orden judicial. Según la principal hipótesis que manejan los investigadores, la agresión con el cuchillo contra su novio se originó a partir de una discusión, aunque no hay certezas sobre las causas de ese conflicto. En tanto, la carátula señala lesiones y amenazas calificadas por el uso de arma, aunque podría cambiar con el avance de la investigación que recayó en la fiscal Betina de Lacky de la UFI N°2 local.
En principio, el reconocimiento médico no arrojó ningún registro de alcohol o estupefacientes en la mujer. Y si bien la calificación del delito que cometió Celeste no amerita la orden de detención —sí procesarla y que ella continúe en libertad—, el argumento de indefensión de la víctima ante su situación de incapacidad al estar en silla de ruedas y el objetivo de preservarlo a él de posibles futuros ataques fue lo que impulsó a la fiscalía a pedir su detención ante el juez.
La medida preventiva por un posible nuevo ataque a la víctima, quien sufrió la amputación de una de sus piernas tras un accidente, no es azarosa, debido a que se ajusta al historial de la mujer y sus antecedentes violentos.
El historial de violencia que registra Celeste también le costó la tenencia de sus hijos, debido a que uno de ellos está en un hogar de abrigo y otro fue dado en adopción, señalaron a este medio fuentes de la investigación. En este sentido, vale la aclaración de que los menores no son hijos de Maximiliano P., con quien son concubinos.
“Todos los antecedentes que tiene están vinculados con resistencia a la autoridad y amenazas. Si se la tuviera que definir, se la podría definir como una persona violenta”, enfatizaron fuentes de la investigación.
Además de tener causas iniciadas, Celeste cuenta con una en la que registra una condena de ejecución condicional. Ahora, con este nuevo incidente, esa medida podría ser revocada. Esta última agresión con un cuchillo a su pareja agravó su situación, por lo que para ella inició un camino adverso en el plano judicial.
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