La Ford F 100 color mostaza pasó el semáforo de la esquina de Malvinas Argentinas y la avenida Rivadavia en rojo. Los agentes de la Policía de la Ciudad que estaban apostados en esa zona del Caballito porteño de Caballito le frenaron la marcha, no sólo por la infracción. La camioneta tenía una patente ilegible y los datos del dominio correspondían a un mujer. Al volante iba un hombre, quien enseguida sacó plata: primero ofreció 5 mil pesos, luego 10 mil y llegó a los 15 mil en mano, dijeron las fuentes consultadas por Infobae.
La respuesta de los policías fue llamar a dos testigos e iniciarle la infracción y la denuncia por haber intentado sobornarlos: el delito es cohecho. Eso no fue todo, cuando chequearon su identidad ahí entendieron sus esfuerzos por zafar de dar siquiera su nombre y, también, su nerviosismo: de apellido Barrera y de 60 años tenía pedido de captura por una causa por el delito de tentativa de homicidio radicada en Lomas de Zamora de 2017.
Así, se logró la detención del sospechoso prófugo, indicaron desde el Ministerio Público Fiscal porteño este jueves.
Todo comenzó el miércoles, a las 11.45, cuando la F-100 mostaza con la patente ilegible cruzó con el semáforo en rojo la intersección de avenida Rivadavia y Malvinas Argentinas. En ese momento, los oficiales al observarla buscaron en los registros y descubrieron que la camioneta estaba a nombre de una mujer. Luego, lo interceptaron en el cruce de Rivadavia y Bacacay.
Cuando bajó de la camioneta, los policías notaron que Barrera estaba nervioso, tenso y exaltado. Los agentes, entonces, le pidieron su identidad y el hombre respondió dubitativo su nombre y dijo no recordar su número de documento. También, indicó que no sabía leer ni escribir.
Sin embargo, pocos minutos después, dijo su nombre con más seguridad y los policías le solicitaron su DNI. En ese instante, el hombre tomó su teléfono celular y realizó un llamado. Del otro lado de la línea, la voz de una mujer dictó un número de documento a los efectivos e informó que Barrera había nacido en junio de 1962.
Tras el llamado, Barrera se acercó a uno de los agentes y le ofreció 5000 pesos. El policía los rechazó. Barrera, entonces, subió la apuesta y le intentó dar 10.000 pesos y obtuvo la misma respuesta negativa. Por último, pensó que si aumentaba el monto, tal vez el otro agente iba a olvidar la secuencia y seguiría su camino. Barrera mostró 15.000 y consiguió el mismo resultado y terminó imputado y detenido por cohecho.
Luego, la Unidad Fiscal de Flagrancia Oeste convalidó la detención, y una vez detenido, se supo que el hombre tenía pedido de captura por tentativa de homicidio, solicitada por el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Lomas de Zamora. El imputado quedó detenido a disposición de ese tribunal.
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