El lunes por la madrugada, dos countries de la zona de Brandsen fueron asaltados por un grupo comando de siete delincuentes. Tenían en su poder armas con silenciadores y estaban vestidos con uniforme y chaleco policial. Rompieron los cercos perimetrales e ingresaron a dos casas de dos barrios diferentes. En la primera, maniataron a una mujer y a su hijo de 15 años y en la segunda aprovecharon que una pareja de jubilados dormía para desvalijarles la casa.
La Justicia sospecha que podría ser la misma banda que ya robó en la zona en dos ocasiones anteriores.
“No sabemos si efectivamente eran profesionales, pero se movieron como tales. Primero ingresaron al barrio Campos de Roca 1 y luego a otro en las inmediaciones llamado Área 60. Hay varias cosas que tenemos que investigar pero está claro que habían hecho inteligencia previa”, explica una fuente que investiga los dos hechos.
Ambo robos son investigados por la fiscal Mariana Albizu, la misma que investigó las entraderas producidos en el 2020 en ese mismo country, Campos de Roca, cuando todavía vivía Diego Armando Maradona.
Según datos de la causa, los delincuentes ingresaron a ambos barrios cortando parte del alambrado perimetral. “Evidentemente sabían que ahí no hay sensores de movimientos por eso lo cortaron como quisieron”, explica un vecino de uno de los barrios. En las imágenes que acompañan esta nota se observan los cortes al tejido metálico y las marcas de evidencia realizadas por la Policía Bonaerense.
En el primer country, maniataron a una mujer que y a su hijo de 15 años. Ambos estaban durmiendo pero se despertaron cuando escucharon ruidos. De esa casa se llevaron, al menos, $60.000 y objetos de valor.
Luego cruzaron al otro barrio, Área 60, e ingresaron de la misma manera. Una vez en el interior fueron directamente a la casa de dos jubilados que también dormían al momento del robo.
En las imágenes de las cámaras de seguridad se ve a los ladrones merodeando cerca de las 3:45 de la mañana en busca de alguna forma de ingresar. Siete minutos más tarde, la encuentran. Uno de los ladrones entra por una ventana que quedó mal cerrada y una vez en el interior abre la puerta principal a sus cómplices.
Una cámara enfocó a uno de los ladrones a las 4 AM. Se ve claramente que en su mano derecha porta un arma con silenciador, enfundado en chaleco policial, aunque no queda claro a que fuerza pertenece.
Se cree que estuvieron adentro cerca 20 minutos. De hecho, se ve en las imágenes que a las 4:24 la víctima bajó porque escucho ruidos pero ya los ladrones se habían ido. No trascendió aun el monto robado a esta casa, pero se sabe que se llevaron objetos pequeños pero de gran valor.
“No tenían un lenguaje tumbero. Todo lo contrario. Hablaban como profesionales. Estaban vestidos con ropa de policía nueva”, dijo la mujer que fue atada junto a su hijo. También aclaró que no fueron violentos físicamente pero si verbalmente.
Por estas horas, la fiscal Albizu revisa cámaras de seguridad y recolecta testimonios para tratar de seguir el rastro de llegada y de huida de los delincuentes. Por el momento no hay nadie identificado. “La investigación está en pañales. Las víctimas son gente importante y se mantiene todo en reserva”, explica una fuente policial.
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