Un escandaloso procedimiento policial ocurrió este martes en pleno microcentro de Rosario, cuando un repartidor discutió con agentes municipales y policías por haber estacionado en un lugar prohibido y terminó siendo detenido de una forma violenta. Los vecinos, testigos del operativo, movieron los contenedores de residuos tipo barricada para impedir que se llevaran al conductor, quien finalmente terminó demorado hasta la medianoche en la Comisaría 2ª. Luego, uno de los agentes que participó en la aprehensión fue pasado a disponibilidad tras dar positivo el test de narcolemia por cocaína.
La jefa de la Policía de Santa Fe, y que también tiene a su cargo Rosario, Emilce Chimenti, se pronunció sobre el caso este mismo miércoles desde la Unidad Regional II: “Por la parte que yo vi del procedimiento, fue una resistencia a la autoridad. Tengamos en cuenta que esto no hubiera pasado si la persona aceptaba su multa”.
Ricardo, el repartidor, dejó su auto en Mitre al 900, una cuadra en la que está prohibido estacionar. Al regresar, tres inspectoras de Tránsito Municipal le comenzaron a labrar un acta por la infracción. En ese momento, comenzó una discusión que subió de tono y en la que el conductor exigió a las agentes su identificación mientras filmaba la escena.
Las empleadas municipales brindaron el número de agentes de control y dos de ellas no llevaban pegadas sus identificaciones –aunque no es obligación, según aclararon desde el Ejecutivo local-. Luego, se cruzó otro inspector por delante del auto, quien aseguró que el repartidor lo quiso embestir para irse del lugar con su vehículo.
De la situación trascendieron varios videos. Uno es el de Ricardo, filmando a las inspectoras. Pero también los vecinos comenzaron a grabar con sus teléfonos el momento en el que el repartidor empezó a discutir con dos policías que arribaron al lugar por pedido de los agentes municipales.
En distintos videos puede verse que Ricardo fue reducido por dos policías, quienes lo sujetaron violentamente del cuello y lo tiraron al suelo, donde intentaron ponerle las esposas mientras el conductor se resistía.
La furia de los vecinos que fueron testigos de la situación, y que les remarcaban a los policías que el hombre se estaba poniendo azul, fue tal que cruzaron dos contenedores de residuos en la calle Mitre para impedir que los móviles policiales que se llevaban a Ricardo aprehendido se fueran del lugar. Finalmente, una camioneta de la fuerza de seguridad salió en reversa hacia la seccional 2ª, ubicada en Paraguay y Mendoza, todo en el microcentro de Rosario.
Familiares y hasta testigos de la violenta detención fueron a la comisaría para exigir que lo liberen y que lo revise un médico, ya que había sufrido golpes durante la aprehensión. Finalmente, lo revisó un doctor y constató lesiones en el ojo izquierdo y escoriaciones en la cabeza y rostro. Ricardo este miércoles afirmó en Radio 2 que también tiene “golpes en todo el cuerpo”.
A la jefa policial de Santa Fe este miércoles le consultaron si justificaba el accionar de los policías en el marco de una rueda de prensa: “Lo que vi me pareció que era correcto”, dijo. Y agregó: “Hablamos de brutal agresión cuando estamos pegando piñas, patadas; y fueron a tratar de reducir a la persona que en ningún momento dejó de resistirse”.
Cuando le consultaron sobre la “llave” que uno de los policías le aplicó a Ricardo, Chimenti sumó: “Adoptaron las medidas que pudieron porque, la vedad, es que estaba muy sacada la persona. Hubo una resistencia durante todo el tiempo”.
Lo cierto es que a Ricardo se le formó causa penal por amenazas y recuperó la libertad a la medianoche al no contar con antecedentes. En paralelo, la División Judiciales de la Policía de Rosario inició actuaciones administrativas sobre cómo se llevó a cabo el operativo. A uno de los dos policías que fueron filmados en la violenta escena se le practicó el test de narcolemia y dio positivo para cocaína.
El policía que había consumido cocaína será pasado a disponibilidad. En principio, por la situación del narcotest, más allá de su proceder en el arresto del repartidor. Así lo confirmó la jefa Chimenti y dijo que no tenía antecedentes, que hace aproximadamente una década que está en la Policía y que el consumo de drogas “es un tema que tenemos que tratar desde la Fuerza también porque estamos hablando de un flagelo que atraviesa toda la sociedad”.
La situación del positivo test de narcóticos es una noticia repetida en Rosario. El pasado fin de semana dieron positivos dos conductores de micros que iban a llevar a contingentes de estudiantes a Córdoba desde la terminal de ómnibus de la ciudad Cuna de la Bandera. Por ese hecho, fue llamado un tercer chofer, que al llegar también dio positivo.
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