La salud de Arturo López (66), el playero de un estacionamiento de Monserrat que se encuentra internado desde el 19 de noviembre tras ser agredido por un adolescente de 17 años, todavía es delicada y su vida aún corre riesgo. Mientras tanto, su familia convoca a una manifestación para reclamar por la detención del agresor, quien continúa prófugo de la Justicia.
Este mediodía, al dar a conocer el parte diario sobre el estado de salud de la víctima, el médico Joan Manuel Vega Anaya de la clínica Iteba del barrio de Flores informó que la evolución de López es “fluctuante” y señaló que el paciente debe mantenerse en la unidad de cuidados intensivos monitoreado “porque aún existe el riesgo de vida”.
“En ocasiones se torna más somnoliento, la respuesta a los estímulos es más débil, pero hay momentos en los que, por ahí, es todo lo contrario: mantiene la apertura ocular espontánea y articula palabras, frases cortas incoherentes aún”, contó a la prensa.
El médico explicó que esta respuesta “es normal en cuanto a la evolución por la gravedad de las lesiones cerebrales”, y aclaró que no se puede precisar todavía que “se trate de secuelas o que esta lesión ya quede de por sí”. Para eso “hay que esperar la evolución”, señaló Vega Anaya, al tiempo que apuntó, sobre la base de su experiencia, que “la evolución en pacientes neurológicos es lenta”.
A su turno, las hijas de López le pidieron al imputado que se entregue y le dijeron que les arruinó la vida. “Estoy cansada, estoy harta de esta rata de mierda que no aparece. Hijo de puta te odio, nos arruinaste la vida. Y ahora está especulando con si mi papá se mejora o no se mejora, y para nosotras es una tortura seguir así”, dijo entre lágrimas Florencia en la puerta de la clínica donde su papá se encuentra internado.
“Este chico se nos está cagando de risa en la cara”, agregó la joven y luego contó que el fiscal Penal, Contravencional y de Faltas a cargo de la causa, Mauro Tereszko, pasó a visitarlas por la clínica para informarles cómo está la investigación.
“El fiscal está haciendo todo lo posible, desde su lugar, para meterlo en cana. Nos dijo que va a pedir la sanción más estricta, pero la verdad es que es muy difícil meterlo en cana, esa es la realidad. A él le corre muy a favor ser menor de edad. Pero no vamos a parar, hijo de puta, si estás mirando esto, aparecé rata, ¿qué más necesitás?”, manifestó indignada Florencia.
En esa línea, le hizo un pedido a la jueza Penal, Contravencional y de Faltas N°3 de la Ciudad de Buenos Aires, Carla Cavaliere: “Que tenga en cuenta lo mal que nos hizo este chico”.
Por su parte, la hija menor, Agostina, agregó sobre el angustiante momento que atraviesan: “Es increíble que sea el día número 12 que está papá internado en terapia intensiva. Además de estar preocupadas por la salud de él, tenemos que estar preocupadas por la parte judicial, ver qué se hace con este pibe que sigue prófugo. Tiene que pagar por lo que hizo”.
Ambas jóvenes pidieron también que cualquiera que vea o sepa dónde se encuentra el acusado, “lo denuncien” y den aviso a la Policía. En las redes sociales, además, convocaron a manifestarse frente al Congreso el próximo jueves, a las 19.
Mientras tanto, Carlos Manuel A., sigue prófugo, por decisión de sus padres, según trascendió desde el entorno del adolescente. A pesar de que hay una orden de captura firmada por la jueza Cavallieri, su familia decidió no entregarlo a las autoridades y nadie sabe dónde se esconde. Ayer, el abogado del menor renunció a raíz de esta oposición a ponerse a derecho.
Esta no es la primera vez que el chico se enfrenta con la Justicia. El 21 de septiembre pasado fue denunciado en la comisaria 14C de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires por el delito de estafa y defraudación. Según fuentes judiciales, no sería el único imputado en esa causa y se trataría de una operación espuria de compra-venta de un auto.
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