La inseguridad y los actos violentos en Rosario no cesan y este domingo por la noche la ciudad santafesina volvió a ser escenario de dos feroces balaceras en la vía pública que tuvieron como blanco dos locales gastronómicos: un restaurante y un local de comidas rápidas.
En el establecimiento “El Establo”, situado sobre la avenida Pellegrini al 1700, un mozo resultó herido de bala y fue trasladado en un automóvil particular al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca). Mientras que en el carrito “Jorgito Junior´s”, ubicado en la calle 27 de febrero al 800, dos personas fueron atendidas en el lugar por personal del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (SIES) con lesiones muy leves.
Ambas balaceras ocurrieron casi en simultáneo. Según fuentes oficiales, el primer llamado al SIES ocurrió a las 23:50 de ayer para alertar sobre la presencia de heridos de armas de fuego frente al local de comidas rápidas. Y minutos después se produjo otra comunicación telefónica con un pedido de ayuda por lo sucedido en el restaurante.
Lo que más preocupa a los rosarinos y a las autoridades locales es que los ataques ocurrieron durante el fin de semana largo, donde la concurrencia turística se hizo sentir con fuerza en la ciudad y los hoteles reportaron una ocupación del 80 por ciento.
El caso más grave fue el que sucedió en “El Establo, que se encuentra en uno de los sectores gastronómicos más tradicionales de la ciudad, que anoche tenía una actividad intensa y los restaurantes estaban colmados de gente.
Allí, la policía constató tres impactos de bala en su fachada, otro en la puerta de acceso y dos más en un vidrio lateral. En cuanto al mozo que fue alcanzado por un disparo, fuentes oficiales confirmaron que sufrió una herida en la parte alta del hemitórax derecho. Debido a que el hombre evolucionó sin inconvenientes, esta madrugada ya le dieron alta médica.
En “Jorgito Junior´s”, dos jóvenes que estaban en el lugar, de 16 y 18 años, resultaron heridos. El más chico fue asistido por un roce de bala en el antebrazo derecho y el otro por una lesión leve en la espalda.
Los primeros testigos que fueron indagados por la policía coincidieron en que las dos balaceras fueron perpetradas por hombres a bordo de motocicletas y las sospechas apuntan a que la intención sería amedrentar a sus dueños para que les paguen a estos delincuentes para evitar que los ataques sean aún más violentos.
Rápidamente, las redes sociales se hicieron eco de lo sucedido y el usuario @MartnAlejandr10, que estaba cenando en familia en el restaurante, tuiteó: “Cumple de mi suegro, festejo en El Establo, todo iba bárbaro hasta qué nos cagaron a tiros, sí señor, nos cagaron a tiros, Rosario ciudad del pecado año 2021, la triste realidad”.
En tanto, un mozo de “El Establo”, relató cómo vivió el ataque por dentro y compartió fotos de cómo quedó el lugar tras la balacera. “Noche de mierda… Todo iba bien hasta que nos cagaron a tiros en el trabajo. Cuatro disparos y un mozo herido fuera de peligro, una moto roja. Gracias al universo el mozo está a salvo, la bala sólo lo rozó”, escribió @ChapuDiazCM.
En cuanto a lo sucedido en “Jorgito Junior´s”, el reportero gráfico Sebastián Granata fue uno de los primeros en dar a conocer los hechos al tuitear la foto de tres policías custodiando el frente del local de comidas rápidas. “Hubo tres balaceras esta noche en Rosario. En una de ellas, me tocó estar presente en el momento del tiroteo. Nunca creí que iba a vivir un episodio así”, contó con indignación.
Mientras que @virgipedernera, que le tocó observar toda la secuencia delictiva a pocos metros de distancia, también expresó su angustia: “Estaba en el parque en el momento de los tiros. Lleno de gente como siempre. Una masacre pudieron cometer”.
Los hechos de este domingo ocurrieron tras las recientes balaceras contra estaciones de servicio y anteriormente contra las escuelas habilitadas para las elecciones de medio término.
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