Dos días después de la muerte de Lucas González, el futbolista de 17 años baleado por la policía de la Ciudad de Buenos Aires, el Ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Marcelo D’Alessandro, y el abogado de la familia del joven, Gregorio Dalbón, brindaron una conferencia en conjunto. “Estamos hablando de tres asesinos que trabajaban de policías”, señaló el letrado. El funcionario, a su vez, destacó que los efectivos “tendrán que dar explicaciones a la Justicia”.
“Estamos hablando de tres asesinos. No estamos hablando de la Policía, pero tres asesinos que trabajaban de policías que debían cuidarnos y lo que hicieron fue asesinar a Lucas y destruir una familia”, comentó el letrado.
El ministro de Seguridad porteño, a su vez, sostuvo: “Quiero ser enfático: estamos hablando de tres personas que tendrán que dar explicaciones a la Justicia. No estamos hablando de la Policía o la institución policial”.
“Quiero desterrar las palabras ‘gatillo fácil’. Acá no había delincuentes, por lo tanto no hay ‘gatillo fácil’. Acá lo que había era una pistola, un asesino y una víctima y eso es lo que pasó”, insistió Dalbón.
El abogado también apuntó contra el titular del Juzgado Nacional de Menores N° 4, Alejandro Rodolfo Cilleruelo, quien estuvo a cargo de la investigación en un principio. “El martes vamos a interponer el juicio político para que sea destituido el juez de menores que dejó en libertad a los policías”, señaló.
Cilleruelo, tras prohibir la salida del país de los tres policías porteños acusados de asesinar al futbolista de 17 años, también se declaró incompetente. Por esa razón, el expediente pasó a manos del juez y el fiscal del fuero penal de mayores que estaban de turno el día del hecho en la zona de Barracas. Se trata del Juzgado Criminal y Correccional 7, a cargo del juez Martín Carlos Del Viso, y la fiscalía, la número 32, a cargo de Leonel Gómez Barbella.
“Como ustedes saben, para mantener la transparencia en este tipo de hechos las investigaciones y las pericias, se las dan a otras fuerzas y en este caso las tiene la Policía Federal. Seguramente el juez y el fiscal que tienen ahora la causa van a ordenar a ello. Nosotros nos pusimos a disposición”, detalló D’Alessandro.
El ministro de Seguridad también se refirió al cuestionado accionar de los efectivos, quienes actuaron de civil y sin identificarse en la persecución realizada a los jóvenes el último miércoles. “Existen dos tareas que se realizan de civil. Una es cuando está la orden judicial en una investigación específica, donde obviamente no pueden estar de uniforme; y otra es cuando actúan en prevención, como ubicar puntos de venta de droga”, comentó.
Luego, remarcó: “Hay algo que es requisito fundamental e inquebrantable: al momento de actuar, el policía siempre tiene que identificarse. La carga no está en el ciudadano, es un requisito del protocolo a cumplir del policía. Cuando están en funciones, deben identificarse”.
En la noche de ayer, el fiscal pidió la detención y las indagatorias de los tres policías acusados de matar a Lucas González. En ese sentido, el agobado señaló: “El juez de la causa parece una tortuga, no entiendo por qué no dispone la orden de detención. Están cercados, a punto de ser detenidos y solo falta la decisión del juez”
Lucas González, el joven de 17 años que fue baleado por un grupo de policías de la Ciudad, recibió un disparo en la cabeza que le quitó la vida. Así, lo confirmó el resultado preliminar de la autopsia ordenada por el fiscal Leonel Gómez Barbella, titular de la Fiscalía N°32. Además, se reveló que la causal de la muerte fue la lesión el proyectil que le ingresó en el cráneo y le causó una hemorragia interna, según confirmaron fuentes del la investigación a Infobae. También, indicaron que Lucas tenía un surco en el pómulo derecho de una segunda bala. Es decir, que hubo un segundo disparo a matar.
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