El insólito “shopping de los chorros bonaerenses” en Facebook donde venden armas para salir a robar

El grupo Motos Crudas Zona Oeste en Facebook, fuera del contexto usual del Marketplace, al que se accede mediante un simple pedido de ingreso que es aprobado o no por un administrador, tiene 45 mil miembros y un funcionamiento simple. El término “moto cruda” suele indicar una moto sin papeles, entera o en partes. Las ofertas de vehículos con documentación suelen ser la mayoría, si se observa el muro con detenimiento. Los ofrecimientos resaltan la portación de papeles, también los pedidos. “Todo legal” es una muletilla.

También se ven piezas de desguace, desde horquillas hasta cubiertas y escapes, con procedencias un poco más cuestionables. Otros son más intempestivos. “¿Qué hay por este celu?”, sugieren, mientras muestran smartphones con la pantalla quebrada. Ocasionalmente, algún despistado postea una planta de marihuana que crece en su patio en un balde de pintura o directamente en el suelo y realiza la pregunta de rigor: “¿Qué hay?” Otros en la misma tónica son más inteligentes, pero no tanto: “Busco jazmines, guiño”, posteó una chica la semana pasada. Le respondieron con una serie de fotos de cogollos.

Pero lo peor de todo son las armas.

En las últimas semanas, las ofertas de pistolas y revólveres se acumularon en el grupo. Cada posteo genera diversas respuestas, con otras ofertas de pistolas. Los revólveres calibres 22 o 32 son la norma. No se suelen ver pistolas 9 milímetros, la figura preponderante en el parque de armas del hampa bonaerense.

La lista de precios: de 12 mil por una vieja pistola destartalada a 75 mil por un modelo en condiciones casi óptimas. Una réplica a gas puede valer 20 mil pesos.

El trueque, de acuerdo a las conversaciones relevadas, es la principal modalidad: arma por arma, o por moto. No se estila pedir efectivo directamente. Un mismo usuario puede insistir con varios pedidos u ofertas. “¿Alguna moto con papeles por un 22 flama?”, preguntaba uno el 25 de octubre, que luego pedía: “¿Alguien que tenga una 357 al negocio?”

Ante el posteo de fotos, comienzan las ofertas: motos, teléfonos, lo que sea. Otros, cual pirañas, aprovechan los hilos de conversaciones y se suman. “Tengo balas de 12 balas de 32 si a alguno le sirve”, decía uno el viernes pasado. “Compa, ¿tenés las balas?”, le insiste otro, “tenés DM, fijate”. Los usuarios que incurren en estos canjes no suelen dejar su cara. Otros sí. “Tengo una 380 y plata arriba por una 9″, ofrecía otro, con una foto fácilmente identificable, nada que una brigada policial especializada en seguimientos digitales no pueda resolver para llegar a su identidad.

Las balas que acompañan a las armas en las publicaciones, curiosamente, son más demandadas que las armas mismas. Invariablemente, un posteo de una pistola o revólver con municiones recibe una serie de ofertas ansiosas por las balas. Otros ponen lo que tienen y ya. “¿Algún 110? Soy de Moreno, permuto”, consultó este fin de semana otro joven que posteó una imagen de un viejo revolver 32 largo y una consola Xbox.

Curiosamente, el arma más cara en toda la página es una Bruni 92, ofrecida a 75 mil pesos, una pistola que, por diseño, solo dispara salvas, una réplica de una Beretta 9 milímetros. “Falta el cargador”, aclara el encargado de la venta. Los vendedores también se vacilan entre ellos. “Andá sucio, pedazo de vende droga, andá pa’allá”, tiene que escuchar uno que asegura vivir en el barrio 22 de Enero de Ciudad de Evita.

La oferta sigue en otros rubros: un usuario que fue particularmente cuestionado ofrecía registros de conducir express en “el Registro de Ituzaingó”. “Te lo escanean y te querés matar”, responde uno, desconfiado.

Hay fiscales avezados que conocen el grupo. “Hace varios años que opera. Está todo ahí. Se robaba una moto y antes de que la víctima pudiera rastrearla la ofrecían en el grupo. Así, llegamos a desarmaderos”, relata uno de los más eficientes investigadores de la zona oeste: “En un momento estuvo un poco controlado, después se fue de mambo”, continúa. El microtráfico de armas bonaerense a red social abierta parece imposible de frenar como fenómeno, un carril que acelera el microtráfico de armas, el pase entre una mano y otra. “Se mira muy poco porque no damos abasto”, reconoce una fuente en los organismos de seguridad que conoce directamente la problemática.

La ruta de las pistolas del hampa que terminan en Facebook puede tener ribetes insospechados. A mediados de este año, se registró un faltante de 15 armas en la sede de la UTOI, la unidad táctica que se convirtió central en la gestión Berni. El propio ministro tiene su base operativa en el lugar. Dos de las Bersa Thunder 9 milímetros que fueron retiradas de la UTOI aparecieron, precisamente, vendidas en Facebook por dos delincuentes que terminaron detenidos. Es solo una boca de expendio para la inseguridad descontrolada en el conurbano. Mientras tanto, los números actuales y reales son elusivos.

Hasta ahora, el Ministerio de Seguridad de Sergio Berni -que reconoció la emergencia en seguridad al convocar a personal retirado de vuelta a servicio activo en una reciente resolución- no comunicó de manera oficial las estadísticas para el período 2021 a pesar de repetidas consultas. La Procuración Bonaerense, según altas fuentes, no presentará su informe sobre las causas iniciadas este año hasta abril de 2022, en cumplimiento de su calendario usual. Habían presentado un resultado parcial en 2020, una excepción dada la pandemia, que habían registrado una baja notable en varios rubros. Mientras tanto, los hechos se repiten con una ferocidad insólita.

Los únicos números que se conocen de manera fehaciente son los presentados en junio de este año por el gobernador Axel Kicillof a la Comisión Bicameral de Seguimiento, Fiscalización y Control para la Emergencia, que detallaba rubros en diversas áreas de gobierno en una suerte de informe de gestión. Se registraron más de 119 mil hechos entre marzo y mayo de este año, plena pandemia, con la división de “prevenibles” -hurtos, robos, homicidios, violaciones, estafas- y “no prevenibles”, violencia familiar o vecinal. Si se toma junio de 2019, un mes pre-pandémico, hubo 19.249 hechos no prevenibles y 20.730 prevenibles. En mayo de 2021, el informe presentó 12.581 prevenibles y más de 23 mil hechos domésticos o vecinales. Sin embargo, en mayo se registró el máximo pico de contagios diarios, más de 41 mil en una sola jornada, el punto más fuerte de la pandemia. Las cifras actuales para representar el fenómeno de la inseguridad bonaerense se desconocen.

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