Fue el viernes pasado, alrededor de las 19, que en la localidad de San Andrés de Giles vieron por última vez a Santiago Ernesto Christin (67). Al día siguiente, su ex pareja llamó a la Policía alertada por una vecina: el jubilado no respondía ni a los llamados ni en su casa. Lo hallaron muerto. Luego, se revelaría que lo habían asesinado. Hay dos detenidos.
Según pudo saber Infobae, el crimen fue descubierto este sábado en Pellegrini al 900, casi esquina Italia, a unos 80 kilómetros al Noroeste de la Ciudad de Buenos Aires. El cuerpo de Christin, a quien apodaban “Loro”, estaba en una de las habitaciones.
Los peritos de la Policía Científica en el lugar hallaron varios rastros de sangre: en principio, la causa fue caratulada como averiguación de causales de muerte por la ayudantía fiscal de San Andrés de Giles. Los vecinos no salían de la conmoción.
Además, los accesos a la propiedad no habían sido forzados y había varios objetos de valor en el lugar, por lo que se descartaba el robo. De todas maneras, se analizaban las cámaras de seguridad de la zona. Fueron clave.
Incluso se rumoreaba que hacía poco tiempo la víctima había vendido un camión y que nadie sabía qué había pasado con ese dinero, según el portal local Infociudad. Pero esa pista se fue desvaneciendo.
Las fuentes consultadas explicaron que la víctima vivía solo y que hacía tiempo que estaba distanciado de su familia por lo que los testimonios de los más allegados poco le aportó a los investigadores.
Sin embargo, todo cambió con el resultado de la autopsia: se confirmó que la herida que Christin tenía en la cabeza no había sido producto de una caída sino que lo habían golpeado y la hipótesis del homicidio lejos estaba del robo.
Algo había pasado en la casa de la víctima y, según el relato de varios testigos más las cámaras de seguridad, la investigación apuntaba a dos personas.
Así, fuentes policiales informaron a Infobae que en las últimas horas dos sospechosos fueron detenidos: se trata de Pedro Fabián Martínez, de 54 años, y Jordana Benítez, una travesti de 32 años, quienes quedaron a disposición de la UFI N°3 de Mercedes, que investiga el crimen de Christin y especula que ambos mantenían una relación con la víctima por lo que la hipótesis es que el móvil del homicidio fue sexual.
Mientras tanto, a unos 500 kilómetros al Sureste de San Andrés de Giles son los vecinos de Mar del Plata quienes siguen paso a paso lo que sucede con la causa por el crimen de el DJ Leandro “Lele” Gatti.
En las últimas horas se conoció que el jefe de Seguridad del boliche donde pasó música Gatti la noche que lo mataron fue procesado con prisión preventiva por haber actuado como entregador. La misma suerte corrió el motochorro que manejaba la moto la noche del 26 de septiembre en que mataron al DJ para robarle: tenían el dato de que llevaba encima tres millones de pesos.
Ese motochorro se había entregado a la Justicia y ante la fiscal del caso confesó haber participado del homicidio, pidió perdón y hasta contó que el robo no fue al voleo. Sin embargo, aún buscan al autor del disparo que mató a “Lele”. Se trata de Eduardo Maximiliano Urra Zapata (34), quien iba como acompañante en la moto que manejaba el motochorro detenido: tiene pedido de captura.
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