Weng Wuyi, de 43 años, se había registrado como supermercadista en la AFIP cinco años atrás, con un domicilio porteño, según documentos comerciales. En la mañana de hoy, la Policía Federal se lo llevó detenido por un comercio totalmente diferente.
Tras un mes de investigación a cargo de la división Crimen Organizado de la Policía Bonaerense, agentes del Departamento Inteligencia Contra el Crimen Organizado de la PFA actuando bajo una rogatoria lo encontraron en una casa de la avenida Congreso al 4.000, zona de Saavedra. Lo buscaban por atacar un supermercado de su comunidad en Lanús, una extorsión mafiosa perpetrada con una granada de humo, un método de intimidación usual, menos drástico que los empleados años atrás, con sicarios que disparaban a las piernas de cajeros y verduleros o barrabravas usados como pistoleros.
Allí lo encontraron con otros cinco ciudadanos asiáticos y otras cuatro granadas de humo idénticas a las usadas en el ataque, cometido hace un mes. También, en el marco de la causa, se ordenó allanar un supermercado en la calle Corrientes y otro domicilio en la calle San Isidro Labrador.
El conteo final del operativo es uno de los más singulares de la historia reciente, con material criminal muy rara vez visto en el país.
Durante los procedimientos se logró el secuestro de 114.165 pesos, 3.577 dólares, 1.150 bolívares, 320 yuanes, 8 teléfonos celulares, 11 cartuchos calibre .22, 1,25 kilos de metilona -empleado como sustituto barato del éxtasis- 907 gramos de anfetaminas, 5 balanzas de precisión, 8 pendrives, una balanza digital y un contador de billetes.
En el domicilio de la calle Congreso, también, encontraron 14 pastillas de heroína, lo que supone una ruta individual de tráfico de una de las sustancias más inusuales de encontrar en la Argentina: el último lote en registros fue capturado por la Aduana en un envío de correo tres años atrás, 12 gramos de la sustancia.
También se halló un posible foco de juego clandestino. Uno de los domicilios tenía una falsa pared con una cama cucheta y una mesa de paño verde para jugar mahjong, el popular juego asiático, una figura repetida en garitos de la comunidad china como el allanado en Belgrano por la Policía de la Ciudad meses atrás, vinculado a Lin Lifeng, empresario nocturno arrestado por supuestamente intentar traficar cocaína a Australia desde Buenos Aires.
Así, Weng Wuyi quedó a disposición de la Justicia, a la espera de ser indagado, con un expediente inicial de la UFI N°6 de Lanús. Sin embargo, dado lo encontrado, la causa podría esparcirse en diversos fueros. Todavía se desconoce para qué organización mafiosa operaba el acusado, si como supermercadista atacaba a sus competidores o si era, básicamente, un mercenario a sueldo.
Mientras tanto, el acusado fue indagado por la tenencia de drogas en un nuevo caso investigado por la Fiscalía Federal N°1 en Comodoro Py: asistido por dos abogados particulares, aseguró que toda esa droga que le encontraron era para consumo personal.
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