Un motociclista fue detenido ayer cuando circulaba con una carabina AK-47 cargada y con una pistola semiautomática en la ciudad santafesina de Santo Tomé, y cuya documentación para la portación y tenencia de las armas de fuego se encontraba vencida, informaron fuentes de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA).
El hecho ocurrió durante la mañana del jueves en la esquina de las calles 25 de Mayo y Almirante Brown de dicha ciudad del departamento La Capital, cuando efectivos del Escuadrón “Santa Fe Norte Uno” realizaban una recorrida de prevención.
En esas circunstancias, notaron como un motociclista, vestido con un chaleco táctico, se desplazaba con una mochila verde militar, de la cual sobresalía un bulto envuelto en tela y con forma similar a la de un cañón de arma de fuego, informaron los voceros.
A raíz de ello, los agentes le hicieron señas para que detuviera la marcha y al inspeccionar las pertenencias del motoquero hallaron una carabina semiautomática AK-47, de origen alemán, marca GSG, con cargador colocado con 23 municiones calibre .22 LR.
Asimismo, en la riñonera del conductor los gendarmes encontraron una pistola Tanfoglio modelo Delta Force con 11 cartuchos, un cargador con 10 municiones calibre .45 ACP y otras 10 pertenecientes a la carabina.
Al requerir la documentación que acreditara la portación y tenencia de las armas de fuego, los uniformados constataron que se encontraba vencida.
Por este motivo, el Ministerio Público de la Acusación de la ciudad de Santa Fe dispuso la aprehensión del motociclista por el delito de “portación ilegal de armas de fuego” y el secuestro del armamento.
Nuevos crímenes, una fuga y más ataques sicarios tras la condena a Los Monos en Rosario
También en Santa Fe, la violencia mafiosa registrada en Rosario no da tregua, ni siquiera después de que condenaran a 22 años de cárcel al jefe de la organización narco Los Monos, Ariel “Guille” Cantero. De hecho, se intensificó en pocas horas. Todo a raíz de tres asesinatos perpetrados por sicarios en distintos puntos de la ciudad santafesina, donde las víctimas fueron ejecutadas a balazos. A esto se suman ataques intimidatorios con granadas y hasta una doble fuga de una alcaidía.
Uno de los episodios ocurrió en la misma noche del fallo contra el líder de Los Monos, poco después de las 20, entre las calles Martín Fierro al 400 y Maza, en el barrio La Florida. Un lugar situado en el norte rosarino. Allí, según confirmaron fuentes policiales a Infobae, un hombre identificado como Luis Eduardo Campos, de 38 años, fue asesinado a balazos en inmediaciones de la plaza Ovidio Lagos por desconocidos que escaparon con rumbo desconocido después del ataque.
Al día siguiente, otro hecho fue registrado. Se trató del hallazgo en un camino rural de la periferia oeste de Rosario de los cadáveres de dos hombres que fueron ejecutados a balazos. Las fuentes señalaron a este medio que las víctimas estaban una al lado de la otra. A metros de los cuerpos, hallaron un auto Volkswagen Suran gris con las puertas abiertas.
Se investiga ahora si las víctimas fueron asesinados en el lugar o en otro sitio y luego arrojados en esa zona semidescampada, que cuenta con escasa iluminación y donde no hay cámaras de seguridad. Investiga el hecho el fiscal Ferlazzo.
A los tres crímenes hay que agregar una violenta amenaza mafiosa, en la que arrojaron un artefacto explosivo en el interior la casa de un hombre que está registrado como testigo protegido en una causa por un homicidio ocurrido el año pasado. Según las fuentes, se trata del crimen de Sergio Barquero, un asesinato que tuvo lugar el 9 de diciembre de 2020.
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