Horror en Caseros: encontraron 400 vainas de bala en la escena donde un hombre se atrincheró durante 10 horas

Las hallaron tras los primeros relevamientos en el PH donde ayer un hombre fue abatido por la Policía Bonaerense. Además secuestraron dos armas y documentación. Los estudios para resolver el caso estarán a cargo de expertos de Gendarmería Nacional

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Efectivos del Grupo Halcón que participaron del operativo (Amilcar Orfali)
Efectivos del Grupo Halcón que participaron del operativo (Amilcar Orfali)

Peritos de Gendarmería Nacional (GNA) comenzarán a realizar desde hoy las pericias dentro del PH de Caseros donde ayer un hombre de 42 años se atrincheró durante 10 horas, se enfrentó con dos armas a la Policía Bonaerense y finalmente fue abatido tras un infernal tiroteo con efectivos del Grupo Halcón, en el que hirió a tres oficiales. Fuentes de la causa informaron a Infobae que, luego de los primeros relevamientos en la escena del hecho, encontraron cerca de 400 vainas servidas y proyectiles deformados.

Gendarmería ya recibió la orden formal del fiscal de la UFI Nº3 de San Martín que interviene en la causa, Carlos Pedro Insaurralde, de iniciar los estudios en el lugar del violento hecho que mantuvo en vilo a los vecinos del barrio Villa Piñeral. De acuerdo con lo que adelantaron las fuentes, los expertos de GNA llevarán adelante una inspección ocular general y un relevamiento fílmico, fotográficos y planimétrico del PH. Sin embargo, su orden no incluye actuar sobre los cuerpos del secuestrador y el rehén asesinado.

Harán estudios sobre los muebles de la vivienda y los equipos policiales que se usaron durante la secuencia, como por ejemplo las granadas detonadas que se usaron para intentar aturdir al secuestrador.

Tal como reveló ayer este medio, la vivienda donde Alejandro Darío Maldonado mantuvo como rehén y asesinó a su amigo José Alfredo Cáceres (47), para luego resistirse a los tiros por varias horas, terminó convertida en un campo de guerra: cientos de vainas de balas desparramadas, sangre y el cuerpo sin vida del secuestrador junto al cadáver de su víctima.

De las 400 vainas que se encontraron en la propiedad, 300 corresponden a una pistola Taurus 9 milímetros y 100 son de una escopeta calibre 12/70. Ambas armas con su documentación también fueron incautadas para llevar adelante peritajes, mientras que las autoridades se llevaron además documentos personales de Maldonado. Las fuentes indicaron que se va a realizar después de todo, una segunda inspección ocular.

El grupo Halcón por los techos para entrar a la casa de secuestrador de Caseros

Se cree que Maldonado tomó las dos armas para amedrentar a los investigadores durante las diez horas de locura, entre las 23.30 del lunes y las 9.30 del martes, que se resistió. Se sospechaba que estaba armado hasta los dientes tal como informaron las autoridades en un primer momento, pero luego se descubrió apenas tenía la escopeta y la Taurus 9 milímetros, a la que le recargó los cartuchos.

Del tiempo que permaneció atrincherado, las seis últimas las pasó al lado del cuerpo de su amigo José Alfredo, al que él mismo asesinó en medio de la locura que derivó en la toma del rehén. Después trabó la puerta de ingreso con una barra de hierro y se parapetó detrás de la barra que daba a la cocina. Allí esperó a la Policía hasta el fatal desenlace.

Cerca de las 9. 30, mientras el segundero avanzaba, comenzó a escuchar a los agentes del grupo Halcón por los techos de la casa. Como primera reacción, Maldonado miró para arriba y disparó escopetazos mientras gritaba para que se fueran.

Alejandro Maldonado, el secuestrador de Caseros
Alejandro Maldonado, el secuestrador de Caseros

Los efectivos especiales del Grupo Halcón, junto a agentes de la División Canes de la Bonaerense, rompieron una de las paredes de la casa que estaba hecha de ladrillo de canto. Así, el teniente primero Ricardo Abel Abeldaño, de 47 años, que llevaba un perro entrenado para esos momentos, ingresó primero y soltó a la mascota. El can de la Policía corrió a toda velocidad para morder al secuestrador pero Maldonado pudo eludirlo.

El captor disparó sus dos armas a la vez, mientras el teniente primero Abeldaño repelía el ataque. Desde atrás, los hombres que lo acompañaban comenzaron a tirarle a Maldonado.

En esos segundos de fuego cruzado, Abeldaño recibió una herida en el costal derecho y cayó. Maldonado, también: sufrió una herida de bala en el pecho y otra en su hombro. El hombre de 42 años, sangrando y desde el piso, continuó disparándoles a los policías hasta que finalmente murió.

Hoy, los policías heridos evolucionan favorablemente. Los tres que recibieron heridas menores fueron dados de alta en el día. Marcelo Ponce, miembro de la División Sur del Grupo Halcón, que sostuvo el daño más grave, experimentó una leve mejoría en la unidad de terapia intensiva del hospital Carrillo aunque continúa en estado crítico. Recibió un disparo con orificio de entrada en la ingle derecha con compromiso vascular y óseo que le causó un shock hipovolémico. Se le practicó un bypass en la vena femoral y una fasciotomía en la aorta.

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