Hace poco más de una semana, Mónica Ferreyra, mamá de Araceli Fulles, la joven de 22 años asesinada en abril de 2017 en San Martín, recibió un inquietante video en su celular a través del chat de Facebook. Era la filmación de un hombre que caminaba con una ametralladora, acompañada por una breve descripción aún más escabrosa, que le trajo de vuelta a su vida un nombre que ya conocía: el de Carlos Damián Cassalz, uno de los ocho acusados del femicidio de su hija.
En las imágenes que recibió, Cassalz posaba con una actitud amenazante sólo para intimidarla. Ayer, Cassalz fue finalmente arrestado mientras se disponía a votar en un colegio de la calle Lacroze en la localidad. Todo, a un día de que comenzara el juicio en su contra en el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Martín.
Esta mañana, minutos antes de entrar a la sala, la madre de Araceli relató a Infobae: “Fue un video que me mandaron a eso de la 4 de la mañana, hace una semana y media o dos. Era un mensaje de Messenger en el que me dicen ‘tengo ganas de chatear con alguien’. Este es Carlos Damián Cassalz, pensé. Ahí me mandan un video donde aparece el hombre este con una ametralladora”.
La fisonomía, muy presente en su cabeza, correspondía a la de Cassalz, que en la causa por el crimen de Araceli se encontraba a derecho y llegaba libre al proceso. Fue por la amenaza que la Justicia pidió su arresto. El remitente, sin embargo, sigue sin ser identificado.
Mónica, lejos de amedrentarse, hizo la denuncia penal, algo que fue clave para que la Justicia, con el juez Pablo Mandrilli a cargo, pidiera la detención urgente de Cassalz en virtud de que este lunes además comenzó el juicio oral por el femicidio de Araceli. El temor era a que no compareciera en el debate cuando se lo requiera. El resto de los acusado llega al debate en libertad.
“La verdad se hizo justicia. Fue a votar y lo detuvieron”, dijo Mónica, quien aseguró que el video ya está en poder de los investigadores. No es la primera vez que el acusado se ve envuelto en un caso de este estilo: Cassalz ya había sido condenado a dos años de prisión por amenazar a un testigo de la causa cuando salió de la cárcel la primera vez en 2017.
Ricardo Fulles, el papá de la joven asesinada, también habló con Infobae desde los tribunales y se refirió a las amenazas. “Ahora volvió a repetir la misma hazaña, pero lo agarraron porque tenía el pedido de captura. Fue por las imágenes que le mandaron a mi esposa y las amenazas que recibió. Comprobaron que este hombre es el supuesto responsable de todo esto”, dijo el hombre.
Más tarde, ante el canal de noticias TN, diría: “Al que detuvieron ayer es el que asesina realmente a Araceli, en conjunto con los otros imputados. Él fue quien enroscó el precinto en el cuello para terminar matándola”.
El debate comenzó poco después de la 9 en el TOC N° 3 de San Martín, integrado por los jueces Martín Klobovs, Carolina Martínez y Aníbal Bellagio. Serán convocados entre 150 y 300 testigos, y según Fulles, se prevé que se extienda hasta el 7 de octubre. La fiscal de juicio es Mariana Piwarczuk, mientras que el abogado Diego Szpigiel representará a la familia de Araceli.
Además de Cassalz, los acusados que llegaron a juicio son Hernán Rodrigo Badaracco, Hugo Cabañas, Carlos Antonio Ibarra, Marcelo Escobedo, Daniel Alaniz y los hermanos Jonathan y Emanuel Ávalos. Entre los imputados estuvo Darío Badaracco (31), dueño de la propiedad donde fue encontrado oculto entre escombros el cadáver de la joven, pero que fue asesinado a golpes y quemado vivo con agua caliente por dos compañeros de celda en el penal de Sierra Chica.
Este lunes, los padres pidieron que se les aplique la máxima pena a los ocho imputados. “Estamos todos nerviosos. Hay que seguir adelante y pedir la pena máxima para que queden todos presos. Quiero pensar que tiene que haber Justicia porque la verdad con todo lo que le hicieron a mi hija, dejarlos libre sería una vergüenza muy grande”, agregó Mónica.
Los otros ocho imputados fueron excarcelados por la Cámara de Apelaciones de San Martín, que consideró en septiembre del 2017 que, por la “ineficiencia del sistema investigativo”, no pudieron obtenerse las pruebas necesarias para probar sus participaciones en el hecho, según consigna la agencia Télam. “¿Cuántas Aracelis pueden haber ocurrido estando ellos en las calles? Nos da mucha bronca”, aseveró Mónica.
Todos están imputados por el homicidio agravado por violencia de género y por la participación de dos o más personas. A Cassalz se le suma el delito de amenazas agravadas tras la denuncia de Mónica.
Ricardo, por su parte, se mostró aún más conmovido y con algunas reservas hacia la Justicia. Si bien tiene esperanzas de que va haber una condena ejemplar, tiene dudas. “Queremos creer. De entrada fue todo medio complicado, no sólo por la búsqueda desesperada de Araceli, sino que también tuvimos muchas contras. Voy a tener siempre esas dudas. Esperamos la perpetua para todos los imputados porque todos están involucrados. Después es una lotería”, afirmó.
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