Pablo “Chavo” G. y Franco G., alias “Wachín” fueron detenidos en la ciudad de Rosario por su presunta participación como “apoyo externo” en la fuga de ocho reclusos del penal santafesino de Piñero, ocurrida el 27 del mes pasado.
Además, el primero de ellos, fue imputado también por tenencia de arma de fuego ya que al momento de la detención llevaba un revólver calibre 32 y 150.000 pesos en efectivo.
Para los fiscales Matías Edery y Franco Carbone podrían haber integrado el grupo que atacó a los guardiacárceles del lugar, y que posibilitó el escape junto a Walter Soraire de la Unidad Penitenciaria 11.
Franco G. es un joven de 21 años y fue arrestado por personal de la Agencia de Investigaciones Criminales en una vivienda de Colombres al 2800, en la zona este de Rosario. Allí se identificó a siete personas, entre ellas dos menores de edad, y se secuestraron varios teléfonos celulares enviados a peritar.
El joven sería imputado el próximo jueves, aunque no adelantaron por qué delitos, dijeron los informantes.
Para la investigación, por lo menos tres personas llegaron en un Peugeot hasta el límite del penal por un camino externo y, tras cortar con una amoladora el tejido perimetral, ingresaron a los tiros contra las casillas de guardia de la cárcel.
Soraire murió en el lugar como consecuencia del ataque, que fue enfrentado por el personal del Servicio Penitenciario, aunque se investiga si fue alcanzado por el “fuego amigo”, debido al calibre de la bala que lo mató, indicaron los investigadores.
La fuga se produjo la tarde del domingo 27 de junio cuando, tras el ataque armado externo con subfusiles automáticos FMK3, pistolas calibre 9 milímetros y 11.25 milímetros, un grupo de presos rompió un alambrado y, mientras otros apedreaban a los guardiacárceles, lograron dejar el predio del penal y huir en el auto en el que habían arribado las personas que brindaron apoyo extramuros.
El hecho fue registrado por un detenido desde su celda, filmado en video y viralizado por WhatsApp. “Ahí se van los guachos, se re tomaron el palo”, dice el preso que filma mientras se ríe.
Los recapturados hasta el momento son, Ezequiel Rodolfo Romero, Alejandro Antonio Schmittlein, Joel Rojas y Sergio Cañete mientras que los reclusos que aún están prófugos son Claudio “Morocho” Mansilla, señalado como cerebro de la fuga, David Piscione y Martín Cartelli. Sobre ellos la Justicia de Santa Fe ordenó la captura internacional.
Mansilla tiene un parentesco con Alejandro Isaías Nuñez, alías “Chucky” Monedita, un joven capo narco de 25 años que está preso en una celda del pabellón 4 de Piñero, donde cumple una condena unificada a 15 años y 6 meses de prisión, ya que fue sentenciado por haber matado a un joven –identificado como Cristian Machuca– el 22 de enero de 2015 en el barrio Tablada.
Por otra parte, “Chuky” firmó un juicio abreviado por portación ilegal de arma de guerra, robo calificado y amenazas.
Mansilla, por su parte, tendría vínculos con en el hampa con René Ungaro, otro terrible capo, el matador de “Pimpi” Caminos, capo de la barra de Newell’s, asesinado en 2010.
Tiene casi 19 años de ingresos y salidas del sistema penitenciario santafesino a sus espaldas: su primera entrada data de abril de 2002.
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