Damián Escobar simulaba ser un agente de la Policía de la Ciudad. Tenía el uniforme completo: tonfa, chaleco táctico, escudo de la institución, un juego de esposas y hasta una réplica de las pistolas 9mm que utiliza la fuerza porteña. Así consiguió un trabajo, una changa. Custodiaba una peluquería en el barrio de Villa Urquiza. La dueña del comercio lo había contratado pensando que efectivamente era un oficial y sentía que le daba más seguridad.
Sin embargo, el hombre, que también era empleado del conocido custodia privado de famosos Daniel Díaz León, más conocido como “Dani la muerte”, era un farsante y terminó arrestado por esa misma policía a la que decía pertenecer.
El insólito hecho ocurrió esta mañana en una peluquería ubicada en la calle Cullen al 5700, cuando un móvil porteño que realizaba patrullajes de rutina pasó por el comercio. Los efectivos observaron que había uno de los suyos apostado en la puerta del local, pero no lo conocían, no sabían quién era y les llamó la atención. Se acercaron y la trama se develó: Escobar había simulado todo.
Según indicaron fuentes policiales a Infobae, la propietaria del lugar les contó a los efectivos que había contratado a Escobar para que cuidara de la peluquería. De este modo, los policías dieron aviso a la Justicia, que ordenó secuestrar todos los elementos policiales que Escobar cargaba y su detención por los delitos de usurpación de grados, títulos y honores. También se recolectaron distintos testimonios de testigos y se levantaron las filmaciones de las cámaras de seguridad de la zona.
Por otro lado, tras el arresto de Escobar, “Dani la muerte” se hizo presente en el lugar y dijo que el falso policía era su empleado. Por el momento, la Justicia no tomó ningún temperamento en contra del conocido custodio, mientras avanza con la investigación.
Pocos días atrás ocurrió otro hecho en el que un grupo de delincuentes se hizo pasar por agentes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). Sucedió en un casino clandestino en la ciudad de La Plata, cuando cuatro ladrones entraron con réplicas de armas de fuego, redujeron y maniataron a 25 personas. Luego aseguraron a la Policía que eran agentes de la AFI y que se trataba de un operativo judicial.
El episodio ocurrió, cuando efectivos de la Comisaría 9ª de La Plata recibieron un llamado en la dependencia que alertaba sobre una toma de rehenes en una vivienda sobre la calle 11 entre 57 y 58, donde funcionaba el restaurante “Sol Rojo”, a unas pocas cuadras de la emblemática catedral en el centro de la ciudad.
En ese momento, el personal de la DDI de La Plata, en conjunto con efectivos del Comando de Patrullas local, se dirigió hasta el lugar e ingresaron en la casa, un lugar con una amplia cocina y un gran salón comedor que funcionaba como una sala de juego precaria, con mesas de juego donde se llevaba a cabo en ese mismo momento una partida de póker por dinero. En la puerta de la casa, un ciudadano chino les abrió la puerta principal con llave y les permitió el ingreso.
Una vez adentro, los oficiales se toparon con cuatro sujetos con placas identificatorias en el pecho que, en una habitación al fondo de la casa, donde había restos de alimentos podridos por el piso y mucha suciedad, habían reducido y maniatado con precintos a 25 ciudadanos chinos que participaban del juego clandestino.
Los cuatro sospechosos -de 20, 21, 22 y 47 años de edad- se presentaron como agentes de la AFI y aseguraron que llevaban a cabo un operativo de detención en esa casa, dispuesto por un Juzgado Federal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Los efectivos dudaron de su versión y pidieron ver la documentación.
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