Los cuatro integrantes de una familia del barrio porteño de Villa Crespo vivieron ayer una madrugada de terror: al menos seis delincuentes armados entraron a su casa mientras todos dormían y, tras amenazarlos violentamente, los asaltaron. Sin embargo, cuando quisieron escapar fueron sorprendidos por efectivos de la Policía de la Ciudad que habían sido alertados al 911 y tras una persecución que se extendió a lo largo de varias cuadras, cuatro de ellos fueron detenidos. Según confirmaron fuentes oficiales a Infobae, dos de los ladrones escaparon.
Todo ocurrió hacia las 3 de la mañana en una casa ubicada en la calle Julián Álvarez al 800. Allí irrumpió la banda, que luego de amedrentar con armas y golpear a uno de los integrantes de la familia, revolvieron el lugar y pudieron llevarse 10.000 pesos. Fue el ladrido del perro el que alertó a la familia de que algo ocurría. “Saltaron el paredón de la casa de al lado, subieron por mi terraza y entraron. Cuando los veo empezamos a boxear”, relató Daniel, el dueño de la casa, en diálogo con TN. El hombre resultó herido producto de los golpes. “Quedate tranquilo porque te pongo un tiro en la cabeza”, recordó que le dijo un asaltante, mientras le pedían “todo el dinero”.
En medio de la tensión por asalto, la sobrina de los dueños de casa fue quien logró comunicarse con el 911 para denunciar que había ladrones. Fue así que efectivos de la comisaría vecinal 15 se acercaron hasta la propiedad y sorprendieron a los delincuentes mientras trataban de escapar con los objetos y el dinero que pretendían llevarse. Al ver que los policías llegaron, uno de los sospechosos extrajo un arma y provocó que uno de los uniformados efectuara un disparo sin llegar a herirlo.
En ese momento cuatro de los ladrones lograron subirse a bordo de un auto Peugeot 208 de color negro mientras que los otros dos huyeron a pie. Los efectivos se enfocaron en los delincuentes que estaban en el vehículo y comenzaron una persecución a lo largo de varias cuadras. Según las fuentes consultadas por este medio, la banda fue seguida también por policías de las comisarías vecinales 6 y 11, lo que arrojó resultados positivos.
Dos de los sospechosos -informó la Policía de la Ciudad- fueron detenidos en la avenida San Martín al 2700, en el barrio de Villa General Mitre, luego de que bajaron del vehículo para tratar de escapar. Otro fue arrestado a bordo del Peugeot en San Martín y Donato Álvarez, por parte de oficiales de la comisaría 6º, y un cuarto detenido por personal de la 15B.
Uno de los detenidos fue identificado como Hugo Orlando Fuque, de 37 años. Un hombre con domicilio en el barrio de La Boca y sin antecedentes. El segundo es Alan Agustín Salazar Juárez, de 33 años y quien también registra domicilio en el mismo lugar que Fuque. El otro, cuyo nombre es Roberto Nicolás Olivera, tiene 27 años y cuenta con antecedentes: según revelaron las fuentes a Infobae, posee una captura ordenada en 2018 por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 9 de la Capital Federal por robo agravado por el uso de arma.
El cuarto, por su parte, fue identificado como Gustavo Ariel Cabrera Echeverría. Se trata de un joven de 22 años que vive en la Villa 21-24, con antecedentes por atentado y resistencia a la autoridad. De acuerdo con lo que pudo averiguar Infobae, en el 2019 Cabrera Echeverría recibió una contravención por desempeñarse como cuidacoches ilegal. Pero no es lo único. En 2020 fue detectado por la Policía cuando circulaba en una moto sin papeles, después por pasar un semáforo en rojo. Como trató de fugarse y ocultarse en la villa, fue detenido y se le abrió la causa. Según revelaron las fuentes, era quien conducía el auto esta madrugada cuando quisieron escapar después de la entradera en la casa de la calle Julián Álvarez.
Interviene en la causa el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 62, a cargo de Patricia Susana Guichandut, quien avaló lo actuado y dispuso las detenciones de los imputados y el secuestro del auto y el arma. Por lo pronto, la Policía se encuentra abocada a la búsqueda de los dos prófugos. “Para mí tenían un dato mal sobre lo que tenía. Fue un robo al voleo”, dijo Daniel luego del asalto del que fueron víctimas también su esposa Mónica, su sobrina y su suegra, una mujer de 83 años.
SEGUIR LEYENDO