Varios meses después de la muerte de Diego Maradona, finalmente hoy comenzarán las indagatorias en el marco de la causa en la que se investigan presuntas responsabilidades por parte de los profesionales de la salud que lo atendieron en los últimos días de su vida, en la cual están imputados, entre otros, su médico personal, Luis Luque, y su psiquiatra, Agustina Cosachov.
Las audiencias, que originalmente estaban previstas a partir del 31 de mayo pasado pero fueron postergadas debido a la pandemia del coronavirus, iniciarán con la declaración del enfermero Ricardo Omar Almirón, quien de todas formas puede negarse a hablar.
El acusado se deberá presentar a las 12.00 de este lunes en la Fiscalía General de San Isidro, ubicada en la calle Acassuso al 476, para defenderse y, si lo desea, dar su versión de cómo fueron las horas finales del ex futbolista, que falleció el 25 de noviembre pasado en una habitación de una casa en el country San Andrés, en el partido bonaerense de Tigre.
Almirón, de 38 años, será el primero en enfrentar a los fiscales del caso, Cosme Iribarren, Patricio Ferrari y Laura Capra, quienes también les tomarán indagatoria al resto de los imputados que hay en el expediente.
Al enfermero les seguirán su colega Dahiana Gisela Madrid (36), que tiene previsto declarar el 16 de junio; el coordinador de ambos Mariano Perroni (40), que lo hará el 18 de junio; la médica que coordinaba la internación domiciliaria, Nancy Forlini (52), el 21 de junio; el psicólogo Carlos Ángel “Charly” Díaz (29), el 23 de junio; la psiquiatra Agustina Cosachov (35), el 25 de junio; y el neurocirujano Leopoldo Luciano Luque (39), que se presentará el 28 de junio.
Las audiencias habían sido suspendidas por recomendación de la Suprema Corte bonaerense y de la Procuración provincial, que respectivamente emitieron acordadas aconsejando que estos procedimientos empezaran a mediados de este mes, por lo que todo el cronograma de indagatorias se corrió.
“Por las complejas características de la causa, el cúmulo probatorio que se exhibirá a cada imputado y lo extensas que creemos que serán las audiencias, son indagatorias que deben tomarse de manera presencial. Por ello se decidió la postergación”, explicó a la agencia Télam una fuente judicial ligada a la causa.
Los siete profesionales de la salud están acusados de “homicidio simple con dolo eventual”, un delito que prevé de 8 a 25 años de prisión y que representó un cambio de calificación decidido por los fiscales cuando hicieron la primera convocatoria para las indagatorias.
Luque y Cosachov, además, están sospechados de uso de documento privado falso y falsedad ideológica por emplear papeles con la firma supuestamente falsificada de Diego Maradona, así como por emitir certificados médicos sin haber controlado a su paciente en persona.
Para el grupo de los fiscales, todos los acusados que tiene este caso “infringieron los deberes” que tenían a su cargo y “condujeron al fatal desenlace” del astro del fútbol mundial, el cual “hubiera podido evitarse”.
“Habiéndose representado el resultado fatal ante el grave cuadro de salud que evidenciaba la víctima y que era perfectamente conocido al menos por todos los profesionales de la salud antes nombrados, ejecutaron acciones contrarias al arte de la salud y omitieron realizar los actos específicos que cada uno debía desarrollar en torno a su función agravando el cuadro de salud de Diego Armando Maradona”, indicaron los funcionarios al hacer el llamado a indagatoria.
Por su parte, la junta médica de peritos que durante dos meses analizó las circunstancias de la muerte del ex futbolista concluyó, por amplia mayoría, el ex capitán de la Selección Argentina era un paciente con pluripatologías y que agonizó 12 horas antes de morir a los 60 años.
A fines de mayo, el juez de garantías Orlando Díaz, que entiende en el expediente, les prohibió la salida del país Agustina Cosachov y a Leopoldo Luque, al igual que a los otros cinco acusados, luego de que todos ellos fueran formalmente imputados.
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