Cuatro delincuentes protagonizaron un insólito robo este fin de semana en un casino clandestino en la ciudad de La Plata: entraron con réplicas de armas de fuego, redujeron y maniataron a 25 personas. Luego aseguraron a la Policía que eran agentes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y que se trataba de un operativo judicial.
El episodio ocurrió este domingo por la noche, según confirmaron fuentes policiales y judiciales a Infobae, cuando efectivos de la Comisaría 9° de La Plata recibieron un llamado en la dependencia que alertaba sobre una toma de rehenes en una vivienda sobre la calle 11 entre 57 y 58, donde funcionaba el restaurante “Sol Rojo”, a unas pocas cuadras de la emblemática catedral en el centro de la ciudad.
En ese momento, el personal de la DDI de La Plata, en conjunto con efectivos del Comando de Patrullas local, se dirigió hasta el lugar e ingresaron en la casa, un lugar con una amplia cocina y un gran salón comedor que funcionaba como una sala de juego precaria, con mesas de juego donde se llevaba a cabo en ese mismo momento una partida de póker por dinero. En la puerta de la casa, un ciudadano chino les abrió la puerta principal con llave y les permitió el ingreso.
Una vez adentro, los oficiales se toparon con cuatro sujetos con placas identificatorias en el pecho que, en una habitación al fondo de la casa, donde había restos de alimentos podridos por el piso y mucha suciedad, habían reducido y maniatado con precintos a 25 ciudadanos chinos que participaban del juego clandestino.
Los cuatro sospechosos -de 20, 21, 22 y 47 años de edad- se presentaron como agentes de la AFI y aseguraron que llevaban a cabo un operativo de detención en esa casa, dispuesto por un Juzgado Federal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Los efectivos dudaron de su versión y pidieron ver la documentación.
Los falsos agentes intentaron acreditarlo con un oficio judicial trucho en una hoja de papel con el título “orden de detención”, que indicaba la aprehensión de un ciudadano chino “comparando mediante la fuerza pública” (sic). No tenían, sin embargo, una orden de allanamiento o algún documento oficial que habilitara su ingreso a la casa o el supuesto operativo.
La documentación levantó sospechas en los efectivos, que notaron además que los supuestos agentes habían dispuesto una gran suma de dinero en efectivo -6.630.790 pesos y 700 dólares estadounidenses- dentro de tres cajas plásticas. También fueron encontradas e incautadas dos réplicas de armas de fuego marca Apolo, una máquina de contar dinero, guantes de látex, precintos, 23 teléfonos celulares que habían sido robados a los rehenes y una camioneta Volkswagen Surán.
Los investigadores se comunicaron luego con el secretario del juzgado de Capital Federal que supuestamente había confeccionado la orden de detención, que confirmó que toda la documentación era apócrifa. La AFI ratificó también que ninguno de los sospechosos era empleado o agente de inteligencia.
El fiscal Marcelo Romero de la UFI N° 6 de La Plata, a cargo de la investigación del hecho, se trasladó de inmediato hasta el lugar y ordenó la aprehensión por los delitos de robo doblemente agravado por cometerse en poblado y en banda y por el uso de un arma de balines, privación ilegítima de la libertad doblemente agravada por el uso de violencia y simulando ser una autoridad pública y usurpación de autoridad de Javier L., de 47 años, Álvaro P. de 21, ambos con domicilio en Capital Federal, y Rodrigo A., de 20 años, y Matías D., de 22, con domicilio en San Martín. Este lunes por la mañana, el fiscal Romero pidió al Juzgado de Garantías que oficialice la detención de los cuatro.
El fiscal solicitó también información a Dirección Nacional de Migraciones sobre los ciudadanos chinos asaltados, que en su mayoría resultaron ser familiares, para conocer su situación de residencia. Ninguno hablaba mucho español.
El caso del garito no es el primer falso operativo en donde se atacaba a miembros de la comunidad china en Argentina. A principios de abril de este año, cinco delincuentes se disfrazaron de policías federales y de agentes de Migraciones para asaltar un supermercado chino Market Plaza, parte de una cadena muy conocida en Quilmes y Florencio Varela.
En una secuencia rápida, cerca del horario de cierre, y que fue captada por una cámara de seguridad, ataron a los cajeros con precintos y huyeron a bordo de una camioneta Peugeot Partnet color gris con 300 mil pesos en efectivo que había en un cuarto al fondo de lugar, algunas joyas, un celular y hasta un poco de fiambre. El hecho es investigado por el fiscal Darío Provisionato, a cargo de la UFI N° 1 de Florencio Varela.
También, los casinos clandestinos de la comunidad china se convierten en un nuevo foco caliente, con el negocio histórico de la mafia local virando hacia nuevas modalidades. A fines de abril, un garito regenteado por un hombre de la comunidad china fue allanado en el barrio de Belgrano por la Policía de la Ciudad. Había cuatro máquinas de contar dinero y cinco millones de pesos en el lugar. También, siete bolsas de cocaína, una pistola calibre .380 con 13 balas en su cargador y 23 personas presentes alrededor de sus mesas de paño, en una clara violación a las restricciones impuestas por el decreto presidencial para controlar el contagio del coronavirus.
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