En la tarde de este miércoles, Matías Nahuel Paz, un estudiante de derecho de 24 años, se acercó a la Comisaría 1ª de Mar del Plata. Su aspecto dejaba ver los rastros del horror que había cometido: su ropa estaba muy manchada de sangre y una de sus manos, cortada. “Mi mamá y mi hermana están muertas”, anunció frente a los policías. Pocas horas antes, Paz había asesinado a ambas de una manera brutal: las apuñaló en casi 40 oportunidades y a su hermana menor, de 9 años, luego la degolló. El joven quedó detenido por orden del fiscal del caso, Leandro Arévalo, titular de la UFI Nº7 de Mar del Plata, y acusado por el doble femicidio.
El fiscal Arévalo esta mañana lo sentó frente a él y le leyó la acusación en su contra: homicidio agravado por el vínculo, por ensañamiento y por haber sido cometido en contexto de violencia de género. El joven Paz escuchó y luego se negó a hablar. De inmediato fue enviado a un calabozo en la Unidad Penal 44 de Batán, donde se encuentra alojado a la espera de los distintos peritajes que ordenó el fiscal.
Todo comenzó en una casa de Triunvirato al 800, en el barrio Villa Lourdes, en la zona portuaria, cuando la pareja de Laura Verónica Sánchez (45 de años) salió a hacer unas compras junto a otro de los hermanos de la familia. Así en la vivienda quedaron Paz, junto a su madre y su hermana Zoe.
En ese momento, en circunstancias que aún se investigan, Paz tomó un cuchillo “filetero”, con una hoja de 15 centímetros de largo, y las asesinó. En total, el joven estudiante de derecho las apuñaló en casi 40 oportunidades a ambas.
Según el fiscal Arévalo, Sánchez recibió 20 cuchillazos. En ese sentido, también la mujer presentaba algunos cortes en zonas como los brazos, que indicaron que trató de defenderse del ataque.
La menor, por su parte, según la autopsia sufrió al menos 19 cortes. El fiscal indicó que fue asesinada mientras estaba dormida o entre dormida, ya que el crimen se cometió sobre una cama. “Fue tanta la saña que la degolló”, dijo a este medio una fuente del caso.
Tras el doble crimen, Paz intentó prender fuego la casa y escapó. Rápidamente los vecinos alertaron al 911 por el humo que salía de la vivienda. Una vez que arribaron al lugar, los bomberos fueron quienes se encontraron con el horror.
De este modo, mientras el fiscal y los peritos trabajaban en el lugar del crimen junto a autoridades de la DDI y de la Jefatura Departamental de Mar del Plata, el joven buscado se presentó por su cuenta en la Comisaría 1ª. Luego quedó detenido.
El fiscal Arévalo confirmó a este medio que Paz no contaba con ningún antecedente penal. “Estudiaba derecho en la Universidad de Mar del Plata y según los testigos es un chico muy callado”, dijo. Además, indicó que el joven se encontraba en sus “cabales” al momento del crimen. Por otra parte, se investiga si instantes previos al doble crimen ocurrió una discusión. Sin embargo, por el momento, ningún testigo aportó datos en ese sentido. Tampoco existe una denuncia de vecinos que narren ese posible conflicto.
Mientras tanto, se ordenaron distintos peritajes psiquiátricos sobre Paz. También se espera el resultado final de la autopsia. Así, Paz continuará encerrado en la cárcel de Batán.
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