El martes pasado por la tarde, en la provincia de Santiago del Estero, una patrulla de la Gendarmería Nacional detuvo la marcha de un camión de carga Volkswagen que circulaba por la Ruta Nacional N° 34. Era un control de rutina más, pero terminó con el hallazgo de más de 270 kilos de cocaína ocultos y los dos ocupantes del rodado detenidos.
El operativo, desarrollado a la altura de la Balanza de Vialidad Nacional, en el departamento Banda, estuvo a cargo integrantes del Escuadrón 59 “Santiago del Estero” y para descubrir la droga fue fundamental la participación del can antinarcóticos Yasi.
Según informaron desde esa fuerza, el camión provenía desde el norte y se dirigía hacia Buenos Aires. Al momento de examinarlo, los efectivos advirtieron que el perro rastreador marcó la presencia de estupefaciente al pasar por las ruedas del vehículo. Así profundización la inspección.
Los gendarmes extrajeron los neumáticos del transporte y los abrieron utilizando una amoladora. Luego llegó la sorpresa: encontraron paquetes ocultos en el interior de 14 cubiertas. Se contabilizó un total de 273 kilos de cocaína. La droga fue secuestrada, como así también 2.900 dólares estadounidenses y 272.000 pesos argentinos.
Por el hecho se inició una causa con la intervención del Juzgado Federal N° 2 de Santiago del Estero, a cargo del doctor Sebastián Argibay. Los dos ocupantes del transporte, ambos de nacionalidad argentina, quedaron detenidos e imputados por el delito de tráfico de estupefacientes.
La estrategia para disimular droga va cambiando y con el tiempo se van conociendo casos de incautaciones que llaman la atención. La semana pasada, por ejemplo, personal del Escuadrón 45 “Salta” de la Gendarmería detuvo a dos mujeres que viajaban con más de 21 kilos de cocaína ocultos en el tanque de combustible de su auto Chevrolet Prisma.
En aquella ocasión, la droga estaba distribuida en 16 botellas de diversos tamaños. Los efectivos, apostados sobre las rutas nacionales Nº 9 y 34, inspeccionaron el vehículo después de notar contradicciones en los dichos de las ocupantes sobre los motivos del viaje que realizaban hacia Buenos Aires.
En consecuencia, revisaron el auto y observaron que los tornillos del soporte del tanque de combustible habían sido removidos. “Percibieron sonidos en su interior al moverlo”, detallaron voceros de la fuerza. Con la ayuda de una cámara de inspección (boroscopio), los uniformados constataron luego las botellas escondidas.
La Unidad Fiscal Federal de Salta dispuso la detención de las involucradas, el decomiso del estupefaciente y el secuestro del rodado.
Otro método curioso se registró a fines de octubre pasado, cuando gendarmes descubrieron equipos de gimnasia rellenos con casi $3 millones en marihuana paraguaya.
El hallazgo se dio en un control sobre el kilómetro 785 de la la Ruta Nacional 14 a cargo del comando de la estación San José, en Misiones. El camión tenía como destino la ciudad de Villa Mercedes en la provincia de San Luis.
Transportaba un equipo completo de poleas y bancos, siete piezas, con una torre multifunción, un banco plano y uno inclinado para trabajar pectorales que había sido despachado desde Posadas. El engaño se cayó al pesar esos equipos, ya que no coincidía el peso con la estructura.
Otro can, Boni, respondió con su nariz de manera positiva y los uniformados encontraron la marihuana usando una amoladora. Por el caso, se abrió un expediente en el Juzgado Federal de Posadas a cargo de la magistrada Verónica Skanata.
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