Parecía una chance difícil. Entre quienes conocen el expediente que investiga a Irineo Garzón como el responsable de la aberrante violación a una joven venezolana de 18 años en su primer día de trabajo existía el miedo evidente de que se fugara tras ser beneficiado por una polémica excarcelación tras ser procesado por la jueza Karina Zucconi. Había tres domicilios en la causa donde podría encontrarse. Uno en Mataderos, que es la casa de su hermana. Otro podría ser el local de la calle Paso donde ocurrió el ataque. Y también un domicilio donde conviviría con una ex novia. Luego, un cuarto domicilio, en San Cristóbal, un departamento que supuestamente alquilaba y que no figura en la causa. Una versión indicaba que lo habría abandonado sin dejar rastros, con un contrato firmado.
La jueza Zucconi apenas le impuso una restricción de salir del país y la prohibición de acercarse a la víctima, así como un pedido de presentarse en el Juzgado N° 15 de vez en cuando.
Sin embargo, este lunes por la mañana, Garzón se presentó en los tribunales para ser indagado. Según confirmaron a Infobae fuentes cercanas al expediente con Silvana Russi como fiscal, el acusado aceptó responder preguntas ante la jueza Zucconi: negó haber violado a la joven a pesar de las amplias pruebas en su contra que incluyen tres lesiones sangrantes compatibles con abuso sexual y hasta aseguró haber tenido un consentimiento previo. Incluso, habló de una relación previa.
Todo, desde ya, queda desmentido por el relato de la víctima, que aseguró al negarse a que fuera excarcelado: “Me violó”.
Hay, por otra parte, una considerable expectativa por una pericia que se realizará mañana a las 9 de la mañana: el análisis toxicológico a la sangre y orina de la víctima para determinar si efectivamente fue drogada al momento del ataque.
Por lo pronto hay otras pruebas. Se hicieron secuestros en el local: el equipo DVR de cámaras de seguridad, la ropa de la víctima y del victimario, dos vasos con lo que parece ser jugo de manzana, teléfonos y notebooks. Un análisis de huellas reveló rastros compatibles con Garzón.
La víctima también declaró como testigo: aseguró que el contacto con Garzón había comenzado dos días antes en Facebook. Tras beber un vaso de agua, comenzó a sentirse mareada, “ella aceptó agua y luego sintió mareos, hormigueo en los brazos, dificultad para hablar, llegó a llamar a la hermana”, describe el expediente.
La excarcelación de Garzón, que fue apelada tanto por querella como por la fiscal Russi, será resuelta en los tribunales de la Cámara Criminal y Correccional: este jueves, la Sala I con los jueces Pablo Lucero, Magdalena Laiño y Jorge Rimoldi resolverá la situación del acusado de uno de los hechos que mayor indignación causaron en los últimos tiempos. Diego Marías, consejero de la Magistratura de la Nación, presentó hoy ante el órgano una denuncia por “mal desempeño” contra la jueza Karina Mariana Zucconi, al señalar que la magistrada demostró un “desprecio de circunstancias objetivas” que “tornaban inviable” la libertad del comerciante, según información de Télam.
Seguí leyendo: