Las cámaras de seguridad de un local ubicado en la localidad de Merlo reflejaron un furioso accidente de tránsito: dos patrulleros chocaron entre sí mientras perseguían a una pareja de ladrones, lo que provocó que uno de los vehículos se subiera a la vereda y atropellara a clientes que esperaban para comprar en una verdulería.
El hecho ocurrió el sábado cerca de las 11 de la mañana en la esquina de las calles Vieytes y Vespucio. Dos vecinos sufrieron heridas leves y tres efectivos policiales recibieron algunas contusiones en el cuerpo: no hubo heridos graves.
La persecución se inició a comienzos de la mañana en Morón, cuando dos ladrones robaron un auto marca Fiat Mobi color gris. Durante su huida, los dos delincuentes se detuvieron en la esquina de Víctor Hugo y Boulogne Sur Mer, en la localidad de Libertad. Uno de ellos insólitamente bajó con un arma y le robó la cartera a una mujer que caminaba por la calle.
Después de ese robo, la Policía de la Provincia de Buenos Aires fue notificada sobre el hecho y así se dio inicio a un operativo cerrojo para tratar de interceptar el vehículo robado con los delincuentes dentro. Cerca de las 11 de la mañana una camioneta policial Toyota Hilux y un patrullero Toyota Etios que participaron de la persecución chocaron entre sí en la esquina de Vieytes y Vespucio, en Merlo. Como producto de la colisión, el Toyota Etios realizó un trompo y terminó lanzado hacia una verdulería ubicada justo en la ochava de dicho cruce.
“Ahora con la pandemia no está viniendo tanta gente. En otra época, esto habría sido un desastre”, le afirmó Carlos, el dueño de la verdulería al canal de noticias TN.
La colisión fue registrada por la cámara de seguridad del mismo local, donde se pudo ver cómo el móvil policial levanta por el aire a uno de los clientes, quien de manera milagrosa se mantuvo consciente y luego se levantó del suelo gracias a la ayuda de otros clientes.
Como producto del accidente, un chofer de colectivos de 34 años sufrió una herida leve en una muñeca y un cliente, adulto mayor, sufrió apenas un corte en una pierna. Este último fue derivado a un hospital cercano, donde permaneció bajo estudios durante dos horas y luego regresó a su domicilio.
Asimismo, el Fiat Mobi robado logró ser detenido por la Policía Bonaerense a los pocos minutos. Allí se encontraba un sólo delincuente, identificado como Facundo Gabriel Mroz de 26 años, con domicilio en Libertad, quien quedó detenido de inmediato. En tanto, su acompañante se dio a la fuga.
Dentro del auto robado, los efectivos secuestraron un arma de fuego calibre .38 no apta para el disparo, una réplica de pistola color gris, a aire comprimido, y una cartera color verde perteneciente a la mujer que había sido asaltada a tempranas horas de la mañana.
La causa quedó así en manos de la UFI Nº 6 de Morón, a cargo de la doctora María Silvana Bonini, que imputó al delincuente por los delitos de robo agravado por el uso de arma de fuego y portación de arma de fuego. A su vez, se inició una investigación a los dos choferes de los patrulleros por el presunto delito de lesiones culposas.
Este fin de semana, una cámara de seguridad en otro punto de la provincia también registró otro hecho brutal: el viernes por la noche, el dueño de una gomería de González Catán fue asesinado de un disparo en el estómago por dos delincuentes y todo quedó grabado por el circuito cerrado de televisión.
Según indicaron fuentes judiciales a Infobae, el crimen ocurrió cerca de las 20, cuando tres hombres con guantes, gorros, camperas deportivas y barbijos ingresaron en el comercio ubicado en la Ruta Nacional 3 al 15.500. El local era atendido por su dueño, Jorge Benítez Vergara (52), de nacionalidad paraguaya.
Una vez adentro, los sospechosos desenfundaron sus pistolas y obligaron a la clientela y a los empleados a tirarse en el piso mientras le dijeron a Vergara: “¡Te vendieron, paraguayo, te vendieron, danos la guita!”. En ese momento comenzaron a revisar el comercio. Forcejaron con la víctima y de un momento a otro, uno de los hombres le disparó: Vergara cayó en el acto, malherido de un tiro en el abdomen.
La víctima del robo sufrió un paro cardiorrespiratorio y fue trasladado al Hospital Simplemente Evita, donde perdió la vida a las pocas horas.
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