Tres jóvenes, de 18, 19 y 25 años, fueron detenidos esta semana en la localidad bonaerense de Pinamar por personal de la DDI de Dolores acusados de integrar una banda dedicada al “escruche”, modalidad delictiva que consiste en asaltar una casa en ausencia de sus moradores, tras forzar la puerta del lugar. Sus víctimas, según precisaron fuentes policiales a Infobae, eran tanto vecinos como turistas que estaban de paso en localidades de la Costa Atlántica en medio del verano.
Los golpes de la banda tuvieron lugar en Valeria del Mar y en Pinamar y los denunciantes fueron cinco: dos tienen su domicilio registrado en la Ciudad de Buenos Aires y otro en Rosario. Las víctimas perdieron una importante cantidad de objetos de valor y dinero en efectivo.
Para dar con los delincuentes fueron de gran importancia los testimonios obtenidos de las víctimas, el análisis de registros fílmicos y otros elementos que pudieron recolectar durante la investigación que comandó el titular de la UFI 4 descentralizada de Pinamar, Juan Pablo Calderón, junto a la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Dolores y la Sub Delegación Departamental de Investigaciones de Pinamar. Todos los sospechosos viven en la zona. Dos tienen domicilio en la localidad balnearia de Ostende y el otro –el de 25 años– es de Pinamar. Los tres deberán enfrentar ahora una acusación por el delito de robos reiterados.
En uno de los episodios, una vecina de Pinamar denunció que luego de que le forzaron la puerta de su casa, los delincuentes se llevaron una notebook, un parlante, relojes, una bicicleta y otras pertenencias. Un hombre, tras enterarse de las detenciones, se presentó ante la policía y vio que uno de los sospechosos aprehendidos llevaba su mochila, con varios elementos que también eran de su propiedad.
Por su parte, una tercera víctima había denunciado que le robaron de la casa en la que estaba hospedada en Valeria del Mar la suma de $25.000 y un parlante portátil. Un turista que paraba en Pinamar, en tanto, le dijo a la Policía que le habían sustraído 10.000 pesos. De la quinta víctima, un joven de 23 años, aún se desconocen los datos de qué fue lo que le robaron.
Con toda esta información, el fiscal pidió inmediatamente un allanamiento a las casas de los tres delincuentes, el juez de Garantías que intervino lo autorizó y así fue que encontraron un importante botín que haría suponer que los golpes fueron varios. En una de las casas, los efectivos de la Bonaerense encontraron un perfume marca Paco Rabanne. En otro de los domicilios, ubicado en un edificio de Pinamar, secuestraron un bicicleta marca Zenith, y notebooks marca Asus, Lenovo y Apple.
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