“Devolvé la plata o vamos a matar a tu mujer y a tu hija”: desarticularon una banda de prestamistas en Rosario

Ofrecían préstamos a personas que, por sus escasos ingresos o su condición laboral no registrada, no podían acceder al mercado formal de créditos. En el marco de la misma investigación también fue detenida una agente policial

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La banda distribuía volantes en la zona del Mercado de Productores de Rosario
La banda distribuía volantes en la zona del Mercado de Productores de Rosario

El supuesto cabecilla de una organización llamada “Los Colombianos”, la cual se dedicaba a prestar dinero a tasas usurarias a personas de bajos recursos, fue detenido en Rosario acusado por el intento de homicidio de un deudor que había sido baleado el año pasado.

Además, una mujer policía también fue detenida en el marco de la misma investigación, aunque por incumplimiento de los deberes de funcionaria pública, abuso de autoridad y posible encubrimiento.

Ambas detenciones se concretaron tras cuatro allanamientos solicitados por la fiscal del caso, Valeria Haurigot. En uno de esos procedimientos, realizado en una vivienda de la calle Crespo al 4200, fue detenido José Francisco Chavarría, un ecuatoriano de 43 años sindicado como uno de los jefes de la organización criminal.

De acuerdo a la investigación, la banda operaba en cercanías del Mercado de Productores de Rosario y es conocida como “los colombianos”, ya que al menos uno de sus integrantes es de esa nacionalidad.

Según los investigadores y a partir del testimonio de las víctimas, el modus operandi de la banda consistía en distribuir volantes en los que ofrecían créditos a personas que, por sus escasos ingresos o su condición laboral no registrada, no poseen acceso al mercado formal de préstamos.

El caso que inició la investigación ocurrió en agosto del año pasado en una vivienda de Patagones al 4100, ubicada en un asentamiento conocido como Vía Honda. Allí un joven de 21 años que era changarían en el Mercado de Productores fue baleado en el abdomen por dos personas armadas, mientras un tercero aguardaba en un moto.

“Devolvé la plata o vamos a matar a tu mujer y a tu hija”, le gritaron antes de irse. La víctima había pedido $5.000 y al poco tiempo se quedó sin empleo en el Mercado, por lo que no pudo cancelar la deuda, que abonaba en cuotas mensuales de monto bajo y alta tasa de interés, precisaron voceros de la pesquisa. Tras el ataque, el joven identificó ante los investigadores al conductor de la moto como el ecuatoriano Chavarría.

A la vez, la Policía detuvo este miércoles a una integrante de la Agencia de Investigación Criminal, que el próximo viernes será llevada a una audiencia imputativa junto a Chavarría, aunque en su caso será por incumplimiento de los deberes de funcionaria pública, abuso de autoridad y posible encubrimiento.

Según la causa, la policía identificada como Liliana Beatriz A. habría intercedido ante colegas suyos cuando en noviembre pasado detuvieron en un control a un miembro de la banda que trasladaba $40.000, para que le permitieran continuar sin justificar el origen del dinero.

Por su parte, Chavarría será acusado por intento de homicidio y lesiones dolosas por el caso de agosto pasado, mientras la investigación continúa sobre los demás miembros de la organización.

Cabe recordar que la semana pasada, también en la ciudad de Rosario, otra banda fue desarticulada por las autoridades. En esa ocasión fueron siete personas, entre civiles y policías, que resultaron imputadas como miembros de una asociación ilícita dedicada desde hace dos años a la usurpación y venta fraudulenta de inmuebles.

El que sería el jefe de la organización, un falso corredor inmobiliario llamado Miguel Ángel Herrera, permanece aún prófugo. Entre los imputados con prisión preventiva hay un abogado acusado de otorgar apariencia de legalidad a las transacciones ilícitas y también tres policías del Departamento Operativo de Investigaciones Especiales de la Agencia de Investigación Criminal, que fueron imputados por presuntas extorsiones a los miembros de la banda a cambio de $200 mil pesos para no investigarlos.

Según la pesquisa de los fiscales Valeria Haurigot y Federico Rébola, la banda inició su actividad al menos en diciembre de 2018. “Dicha organización detectaba inmuebles usurpados o usurpables para luego ocuparlos con personas de esta estructura y falsificar los instrumentos públicos o privados para simular su legitimidad en las posesiones de hecho y así comercializarlos, ofreciéndolos para la venta por diversos canales”, detalló el Ministerio Público de la Acusación (MPA).

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