“Big bombs will go off in argentina, target in the jewish community”. El mensaje fue recibido hace algunos días por la embajada argentina en el Reino Unido y advierte que “bombas explotarán en Argentina” y el “objetivo será la comunidad judía”.
La advertencia fue tomada muy en serio, al punto que las autoridades de la Unidad de Investigación Antiterrorista de la Policía Federal Argentina (PFA) y del Ministerio de Seguridad de la Nación pusieron en marcha inmediatamente una investigación para determinar si la amenaza era real.
Según el informe de Interpol al que tuvo acceso Infobae, la única persona investigada hasta el momento fue identificada como Hassan Zein Aldeen, un hombre de origen libanés de 38 años.
Su nombre aparece en el mensaje -redactado sin espacios- que recibió la embajada argentina: “Hassan zeinaldeenmoving nitro amonio from encarnación to posadas”, “bigbombswillgo off in argentina targetingthejewishcommunity”. Las autoridades todavía trabajan para dar con el autor del mensaje, cuyo usuario era alic.abadi.37.
La primera parte del mensaje señala que alguien está “moviendo nitro amonio desde Encarnación (Paraguay) hasta Posadas (Misiones)”. Cabe destacar que los explosivos que fueron utilizados en el atentado a la AMIA eran a base de nitrato de amonio. La misma sustancia que causó la devastadora explosión en el puerto de Beirut en septiembre pasado.
Fuentes al tanto de la investigación detallaron que hay al menos 14 coincidencias con el nombre Hassan Zein Aldeen. Una de ellos es el hombre libanés de 38 años que “había intentado ingresar al país por el paso Puente Internacional San Roque González de Santa Cruz, desde la ciudad de Encarnación, Paraguay, en cuatro oportunidades, en 2010, 2013, 2016 y 2017”. No logró pasar porque tenía prohibido salir de Paraguay.
El reporte de Interpol también reseña que “se han encontrado diferentes cuentas de Facebook pertenecientes a homónimos, siendo imposible realizar una individualización certera”.
En la causa interviene el Juzgado Federal N°6, a cargo de la jueza María Eugenia Capuchetti. Hasta el momento no se ha encontrado ninguna evidencia concreta en redes sociales ni rastros de los explosivos en áreas de frontera.
“Todo lo que venga de la triple frontera es preocupantes. Es una zona que está fuera de control”, sostuvo Jorge Knoblovits, presidente de DAIA, al ser entrevistado en Radio Rivadavia, quien además destacó que “las alertas tempranas funcionaron y que están rastrillando todo el país”.
Hace tres días, en Encarnación, localidad que pertenece al departamento de Itapúa, la Policía paraguaya secuestró una carga de dinamita en gel. Los portales locales detallaron que la incautación ocurrió el jueves por la madrugada a la altura de la localidad de Coronel Bogado. Los explosivos estaban fraccionados en 12 cartuchos de un kilo y medio cada uno. Se cree que, de explotar, la onda expansiva alcanzaría un radio de 400 a 500 metros.
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