Ocho meses después del inicio de la cuarentena, en la provincia de Buenos Aires fueron tomadas unas 4.300 hectáreas de tierras fiscales y privadas. Se usurparon desde el predio de más de cien hectáreas en Guernica y complejos de viviendas sociales que estaban por ser entregadas o paralizadas –como el denominado barrio ACUMAR, en González Catán– hasta terrenos y casas de particulares.
Uno de los damnificados es Fernando Chique, un vecino del partido de Escobar, a quien el 21 de agosto le ocuparon ilegalmente –según denunció– un lote de casi 6 hectáreas situado en la esquina de Las Heras y San Lorenzo, y exclama que la Justicia se basó en “argumentos insólitos” para no proceder al desalojo.
“El juez no dio lugar al desalojo basándose en un testigo, que es un preventor municipal, que dijo que el terreno tiene pastizales altos y que por tal motivo mostraba cierto abandono”, denunció su dueño a Infobae.
Los ocupantes ingresaron ese día por la noche por la calle San Lorenzo, que es muy precaria, de tierra y poco transitable, haciendo un surco entre la vegetación con machetes. “Se ubicaron en una parte no visible, instalaron carpas y comenzaron a levantar asentamientos precarios. Eran 14 mayores y 12 menores de edad”, precisó Chique.
Fuentes judiciales consultadas por Infobae ratifican la información, con una causa en manos de la UFI N° 5 de la doctora Laura Basualdo y luego a cargo del fiscal Claudio Aundjian, que ordenó varios relevos en la zona. Chique y su copropietaria, al haber sufrido varios robos de alambrados, dejaron crecer los pastos y la vegetación como una suerte de cerco natural, lo que impedía ver qué ocurría más allá. El primer relevo de la Justicia mostró caminos internos y dos ranchos en el centro del predio, con al menos diez menores, lo que llevó a darle intervención a la Asesoría de Incapaces.
Según el dueño, los ocupantes empezaron a lotear el terreno y a venderlo por las redes sociales.
“Tenemos capturas de Facebook donde piden 1 millón de pesos, dicen que ofrecen financiación y que tienen los papeles en regla”, se indignó Chique.
No es la primera vez que ocurre en tiempos recientes: el fiscal Juan Condomí Alcorta también detectó intentos de venta por Facebook de parcelas de la toma de Guernica.
Sus dueños presentaron documentos ante la Justicia para acreditar su titularidad. Tras un intento de mediación penal entre dueños y ocupantes que no tuvo resultados favorables, el fiscal Aundjian pidió el desalojo, al entender que existía una usurpación basada en la clandestinidad establecida en el Código Penal.
Sin embargo, el titular del Juzgado de Garantías Nº 3 de Escobar, Luciano Marino, decidió no hacer lugar al pedido de desalojo solicitado por el fiscal Aundjian al entender que la toma no fue clandestina ya que el predio se encontraba sin ningún tipo de cerramiento ni de límite para impedir el paso de los ocupantes y que el estado de abandono se produjo por la inactividad de sus titulares para su correcta preservación, según información judicial a la que accedió este medio.
“Es insólito. El juez nos culpó por la falta de mantenimiento al lugar. Dijo que estas personas entraron a la vista de los vecinos y que el terreno no estaba siendo visitado por los dueños ni dándole ningún uso, cosa que no es así porque mi mamá vive a 5 cuadras, pasa todos los días por ahí y los vecinos saben que tiene dueño. Además, al ser una zona rural, todos los terrenos son así”, admitió Chique.
De acuerdo a su relato, cuando los usurpadores se instalaron en el terreno adujeron que el dueño había fallecido, desconociendo que tenía herederos legítimos. “Mi papá murió en febrero pero la heredera es mi mamá, que tiene 63 años, mi hermana y yo. Tenemos el informe de dominio, en el que figura que Néstor Chique y María Ramos son los propietarios y que están todos los impuestos al día. Incluso, estamos en un proceso de sucesión iniciado, que es habitual cuando suceden estas cosas”, sostuvo Chique.
“El desalojo fue pedido por Aundjian el 6 de noviembre, pero el juez Marino decidió no hacer lugar al lanzamiento al descartar la clandestinidad. Entendió que no se daba ese supuesto que pide el Código Penal ya que la usurpación es un tipo penal con distintas conductas. Se necesita engaño, uso de violencia o clandestinidad. Pero como el fiscal sí entiende que la hay", precisaron fuentes del caso a este medio. “Nuestra impresión es que hay grueso error de apreciación jurídica desde el juzgado. No distingue cuestiones jurídicas básicas: posesión, tenencia, dominio, uso pacífico”, argumenta otra fuente de peso.
Así, Aundjian apeló la decisión de Marino, algo que deberá resolver la sala única de la Cámara de Casación local.
Mientras continúan las diligencias en la Justicia, Fernando Chique teme que el fallo de Marino siente jurisprudencia y dé “vía libre” a más usurpaciones. “Vivimos un tormento hace tres meses. El fallo que emitió el juez es un papelón. Y además, corremos el riesgo de sumar más problemas legales si se llega a concretar alguna de esas ventas, solo por el hecho de que el juez no haya actuado como corresponde”, concluyó el hombre, quien recordó que fue el propio ministro de Seguridad, Sergio Berni, quien había dicho: “El que pone un pie en un terreno que tiene dueño, va preso”.
Chique, mientras tanto, espera.
Con información de Federico Fahsbender
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