Entre noviembre de 2015 y mayo de 2020, Paola Estefanía Tacacho, una profesora de inglés de 32 años, denunció 13 veces a Mauricio Parada Parejas, un hombre de su misma edad que desde que había sido su alumno en un terciario, en el 2014, la acosaba y amenazaba de muerte a ella y a su familia.
El viernes por la noche, cuando Paola salió del gimnasio y se dirigía a su casa en la ciudad de San Miguel de Tucumán, Parada Parejas la interceptó, cuchillo en mano, y la asesinó de al menos seis puñaladas, una de ellas por la espalda, contra la vidriera de un local. Mientras Paola agonizaba en el lugar, un grupo de vecinos creyó que se trataba de un robo y lo cercó para evitar que se escapara. Uno de ellos incluso le tiró gas pimienta. En ese momento, al verse rodeado, el hombre se clavó con fuerza el mismo cuchillo que había usado para asesinar a Paola en el medio del pecho y murió.
En las imágenes de una cámara de seguridad ubicada en el interior de un comercio, quedó registrado el momento en que Parada Parejas abordó a la profesora salteña, que intentó alejarse luego de una breve discusión, y la apuñaló, según informaron fuentes policiales a la agencia Télam. Si bien el video del local se ve incompleto, la Justicia trabaja para intentar corregir la imagen y reconstruir de la mejor forma posible el femicidio. Otro video, filmado desde un balcón de la calle Monteagudo, muestra el momento en que el asesino se clavó el cuchillo para quitarse la vida.
“La Justicia de Tucumán nunca hizo nada con todas las denuncias que ella realizó y las denuncias que realizamos con nuestra madre y mis primas, a las cuales también acosaba vía redes”, sostuvo Ana, una hermana de Paola, en una carta difundida este domingo. En el escrito la mujer sostuvo que Parada Parejas “tenía vínculos con la política” local, que por eso “nunca lo encerraron ni siquiera un día” y que el femicida “nunca respetó las perimetrales” dispuestas a favor de Paola.
“Nadie sabía cómo averiguaba lo que hacía mi prima ni dónde estaba. Mi prima estaba en pareja con Ana, su novia, y nunca le dio pie para que tuvieran algo. Nunca. El juicio era contra él y la familia”, señaló su prima, que prefirió preservar su nombre, en diálogo con Infobae. La joven contó que en una oportunidad Parada Parejas logró ingresar en el edificio de Paola y le arrojó fotos suyas en el palier.
“La acosaba sistemáticamente: todo comenzó por una ‘mala nota’ y nunca paró. La profesora nunca tuvo el apoyo del instituto ni de la justicia. Que descanses en paz, Paola”, señaló este fin de semana Áilean Fratkin, una de sus ex alumnas. Los amigos de Paola contaron además que Parada Parejas empezó con mensajes privados a la profesora a través de sus redes sociales, a los que ella no le dio importancia, pero que luego se tornaron más violentos e insistentes, con amenazas de muerte explícitas en fotos con su cara e intimidaciones a sus familiares a través de perfiles “truchos”.
Por otra parte, los amigos de la víctima responsabilizaron a la familia de Parada Parejas porque “no aceptaron nunca el problema que tenía” y expresaron que uno de los hermanos les había dicho que “no sabían si era él (el agresor) quien le mandaba mensajes”.
Marcelo, amigo de la víctima, publicó también un video que registró él mismo donde se puede ver a Parada Parejas sentado frente a la casa de Paola, en una clara violación a las órdenes de restricción que la Justicia había dispuesto en su contra.
“Desde que la conoció se obsesionó con ella, y poco a poco fue premeditando lo que concluyó con la vida de mi hermana”, aseguró la hermana de Paola, quien adelantó que este lunes van a realizar una marcha en reclamo de justicia en la Plaza Independencia de la capital tucumana. Paola era salteña y se había recibido como profesora de inglés en la Universidad Nacional de Tucumán. Era amante de la literatura inglesa y tenía el proyecto de viajar a Canadá el año que viene para estudiar.
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