Cuatro delincuentes fueron detenidos luego de ingresar a robar a un edificio del barrio porteño de Monserrat y tomar de rehén a una mujer durante casi una hora, tras no poder concretar el asalto. Al menos dos de los arrestados tienen antecedentes por robo, hurto y salideras bancarias.
El hecho ocurrió en un inmueble de la calle Perú al 600, casi en la esquina con México, a cinco cuadras de Plaza de Mayo. El objetivo de los asaltantes era robarle a un ciudadano cubano que vive en el quinto piso. Tenían el dato de que poseía ahorros en dólares, indicaron fuentes policiales a Infobae.
La banda delictiva elaboró un plan: primero, llamaron al portero eléctrico y dijeron ser policías que iban a realizar un allanamiento. En realidad era una mentira para saber si la víctima se encontraba en su departamento. Después ingresaron al lugar con una copia de la llave del edificio. Subieron al quinto piso y el ciudadano cubano ya los esperaba en la puerta de su departamento.
Los ladrones tenían cloroformo. Intentaron aplicárselo a la víctima, pero esta se resistió. Los vecinos escucharon los gritos y llamaron al 911. Rápidamente, varios patrulleros de la Policía de la Ciudad acudieron al pedido de auxilio.
Los efectivos del primer móvil policial que se acercó se toparon con uno de los delincuentes saliendo por la puerta principal del edificio: intentaba escapar simulando ser un vecino. Los uniformados lo interrogaron pero el sospechoso no supo justificar su presencia en el lugar. En consecuencia, quedó demorado.
Como en el alerta al 911 los vecinos habían precisado que eran cuatro los asaltantes, la Policía procedió a inspeccionar todos los pisos. También cercó la manzana.
Al verse rodeados y sin escapatoria, los otros tres delincuentes que todavía permanecían adentro, se encontraron con la dueña de un departamento del primer piso que justo salía de allí e ingresaron a la vivienda por la fuerza. Los policías que recorrieron el edificio notaron luego que la cerradura de ese departamento tenía la llave puesta. Tocaron la puerta y nadie contestó. Tampoco respondieron a los llamados por teléfono. La vecina había sido tomada de rehén.
Minutos después intervinieron integrantes de la División de Operaciones Especiales Metropolitanas (DOEM) de la policía porteña, quienes negociaron con los captores. La situación de tensión terminó poco más de media hora después, cuando los tres delincuentes depusieron su actitud y se entregaron.
La mujer fue rescatada y atendida por el SAME. “La señora está muy bien y se le brindó apoyo psicológico”, dijo Gabriel Berard, jefe de la Policía de la Ciudad. “Realmente fue algo muy efectivo de parte de la policía”, consideró por su lado el secretario de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro. Ambos estuvieron presentes en el lugar del hecho.
Según se supo luego, uno de los detenidos es argentino, dos son peruanos y el restante, venezolano. “Son delincuentes avezados”, indicó Berard. Uno de ellos tiene antecedentes por robo y hurto, y otro tiene tres causas penales por salideras bancarias.
Interviene en el caso el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nº 11, a cargo de la jueza Paula Petazzi y ante la Secretaría Nº 133, de la doctora Mariana Turner, que dispuso imputar a los delincuentes por los delitos de robo agravado por el uso de arma, lesiones leves, privación ilegal de la libertad personal y robo agravado por ser en lugar poblado y en banda.
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