A Juan Carlos “Bicho” Donato, un productor agropecuario de la ciudad bonaerense de San Nicolás lo mataron de manera espeluznante en su propia casa: el asesino lo golpeó en la cabeza, le cortó la cara a la mitad con un cuchillo, le sacó la nariz y con su propia mano, le extirpó varios de sus órganos y extrajo las vísceras a través de la laringe. En un principio el misterio por el salvaje homicidio era total y si bien los investigadores encontraron algunos rastros, no se sabía hasta entonces quién podía haber cometido el hecho. Tampoco había móvil. Sin embargo, la investigación cambió radicalmente esta madrugada y todo gracias a una insólita situación.
Según confirmó a Infobae Julio Tanús, titular de la UFI 3 de esa ciudad bonaerense y quien tiene a su cargo el expediente, efectivos de la Comisaría Segunda detuvieron hoy hacia las 4:30 de la mañana al presunto autor del asesinato ocurrido en la tarde noche del jueves pasado en la casona ubicada en el kilómetro 233 de la ruta 9. Se trata de un hombre de 28 años de edad, identificado como S.A.T., quien fue capturado en una casa ubicada en la calle Ugarte al 500, cerca del límite al norte de San Nicolás.
De acuerdo con lo que contó el funcionario a este medio, la caída del asesino comenzó a gestarse por un simple altercado familiar. Durante la madrugada de hoy, explicó Tanús, S.A.T. comenzó a discutir fuertemente con su padre en la entrada de la vivienda. Gritos e insultos terminaron con la calma del barrio hasta que la pareja del padre, cansada del ruido y previendo que podría agravarse la situación, llamó a la Policía.
En minutos llegaron los efectivos del comando de patrulla, liderado por el jefe policial Gabriel Cabral, quienes se percataron de que S.A.T. no estaba en sus cabales y además presentaba una serie de marcas en las manos que los hicieron sospechar de que detrás de la pelea familiar había algo más. Debido al impacto por el brutal crimen de Donato, las autoridades locales estaban abocadas a dar con el asesino. Por eso, el jefe Cabral dio aviso de inmediato al fiscal Tanús de lo que estaba ocurriendo en la calle Ugarte. Sabía que podía tener relación con el asesinato.
El detenido no sólo tenía marcas y heridas en las manos;; al ser revisado por los efectivos y ya en presencia del fiscal, todavía tenía rastros de sangre en el cuerpo. Presumiblemente esos rastros hemáticos corresponden a la víctima. Así, el funcionario ordenó la detención del sospechoso para poder indagarlo y ver si tiene relación con el hecho.
Fue entonces que los investigadores encontraron otro detalle que conecta directamente al sospechoso con el homicidio. En el lavadero de la casa donde fue asesinado el productor, la policía halló algunos elementos que pertenecían al asesino: una remera de color rosa, una zapatilla y una tarjeta SUBE. Todas pertenencias del asesino.
De acuerdo con lo que explicaron ayer a Infobae desde la Fiscalía de Tanús, las prendas halladas daban cuenta de que se trataba de una persona de contextura pequeña. El zapato no superaba la horma 37 y la remera era de talla pequeña. De hecho, en el lugar encontraron huellas de pisadas de 22 centímetros de longitud, de acuerdo con lo que revelaron a Infobae. Hasta ese momento todavía no alcanzaba para conectar a S.A.T. con el crimen. Y es ahí donde entra en escena la SUBE que apareció en la casona de campo.
El fiscal Tanús explicó que cuando constataron los datos de la tarjeta descubrieron que pertenecía a una mujer identificada como B.C.T., hermana del sospechoso, quien vive en la ciudad santafesina de Villa Constitución, a 30 kilómetros de San Nicolás. “Eso terminó de relacionar a S.A.T con el hecho. Tenía la tarjeta de su hermana al momento del episodio”, indicó el funcionario. El sospechoso fue llevado inmediatamente a la sede policial que está a cargo de la comisaria Natalia Rojas, quien en palabras del fiscal, facilitó su aprehensión.
Fuentes policiales indicaron a Infobae que el detenido tiene antecedentes penales. Dato que confirmó el fiscal a este medio. “Tiene varias entradas en comisarías de San Nicolás”, aunque aún desconoce las causas. Entre otros datos, reveló que a simple vista se percibe que se trata de una persona que está fuera de sus cabales y que la acusación en su contra será por homicidio agravado por alevosía. “Se observó una anomalía en su salud mental”, señaló el funcionario judicial, quien agradeció la labor de la policía, que vio los indicios en el cuerpo del sospechoso y de inmediato dio aviso de que se trataba de algo más que una simple pelea familiar. S.A.T. será indagado mañana.
Cómo fue el espeluznante crimen
Todo ocurrió el jueves poco antes del anochecer cuando “Bicho” Donato se quedó solo en la propiedad mientras su esposa y su cuñado salían a dar un paseo. Según revelaron ayer desde la Fiscalía a este medio, menos de una hora después la mujer regresó y notó algo extraño: las luces de la casona estaban apagadas, algo llamativo ya que estaba completamente oscuro. De pronto, la esposa escuchó ruidos que provenían de un pequeño lavadero al costado de la vivienda y se acercó para ver qué pasaba.
Quiso abrir pero alguien se lo impidió. Se trataba de una persona que gritaba frases incoherentes y que segundos después salió corriendo a toda velocidad, con el torso descubierto y calzando una sola zapatilla. Dentro del lugar, el desastre. La esposa de la víctima se encontró con una escena dantesca, según describieron los investigadores.
“Había sangre en las paredes, en el techo y las vísceras de la víctima esparcidas por el lugar, al costado del cuerpo”, dijo un colaborado del fiscal a este medio. En palabras del investigador, “parecía una película de terror”: habían cortado el rostro de Donato y el cuerpo estaba rodeado por parte de sus vísceras. Al costado había un cuchillo filoso, que ya está confirmado fue el arma homicida. “Era una laguna de sangre. El asesino le cortó el maxilar, le introdujo la mano por la laringe y le sacó parte del corazón, del hígado, del estómago, de los intestinos. Todas las vísceras. Le extirpó los órganos”, describió con crudeza el funcionario, aunque admitió que nunca vio algo similar.
Donato tenía la cara cortada por la mitad. Ya no tenía nariz. Estaba completamente desfigurado. Hay un dato que todavía no se pudo confirmar: aparentemente habría muerto producto de un golpe contundente en la cabeza. Esto supondría que el asesino mutiló el rostro y extrajo los órganos ya con el hombre muerto. Son datos que se van a terminar de precisar cuando la autopsia se complete.
El móvil aún no fue establecido. La víctima era un hombre sin ningún tipo de deudas y que no recibió jamás una amenaza. Era padre de tres hijos y sólo se dedicaba a la actividad rural. “Es inexplicable”, dijo el fiscal, aún horrorizado.
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