Nahuel Olivera, radiólogo de 22 años, se sentó este lunes a la mañana frente al fiscal de la causa, Fernando Garate, para prestar su declaración indagatoria después haber sido detenido como el principal culpable por la muerte de Tahiel Contreras, el nene de 6 años que murió tras ser atropellado en medio de una picada en Gregorio Laferrere.
Según pudo saber Infobae de fuentes judiciales, Olivera declaró que conocía al segundo detenido en el caso, Alexis Escribanti, un panadero de 24 años, con quien los investigadores aseguran que corrió una picada durante la que ocurrió la muerte del nene. Olivera declaró que la relación entre ellos se forjó en un “picadero”, un lugar donde se hacen este tipo de carreras de autos, ubicado en Esteban Echeverría.
Contó que su Chevrolet Corsa “estaba preparado” para correr pero negó haber estado corriendo una picada al momento del accidente. Solamente aceptó que manejaban a alta velocidad y habría culpado a Escribanti por el choque.
Según informaron las fuentes, Escribanti iba por delante, los dos a alta velocidad. En ese momento, Escribanti realizó una maniobra que no lo dejó observar que delante de él circulaba un Volkswagen Fox que no llegó a esquivar y lo impactó de atrás. Debido al golpe, el Fox embistió a Tahiel y a sus padres que aguardaban para cruzar en la esquina de Ruta 21 y Soldado Sosa.
De esa forma, aunque Olivera negó haber estado corriendo una picada, los investigadores confirmaron su principal hipótesis y quedó imputado por homicidio simple con dolo eventual. Los hombres quedaron filmados por una de las cámaras de seguridad de la zona.
Escribanti, en cambio, se negó a brindar esta tarde su declaración tras ser detenido después de que se había fugado del lugar del hecho. También quedó imputado por el mismo delito y la causa giró a la UFI especializada en Homicidios de La Matanza, a cargo de Gastón Dupla.
En el caso de que la Justicia los encuentre culpables de tal calificación, la pena podría oscilar entre los 8 y los 25 años de prisión. Por lo pronto, permanecerán detenidos. En tanto, la mujer que conducía el VW Fox y que embistió a la familia Contreras accidentalmente, que también se encontraba detenida, recuperó la libertad.
Está tarde, la familia de Tahiel convocó a una marcha donde reclamaron justicia por su hijo y cortaron la Ruta 21. “Lo íbamos a llevar pasear, a comer un helado ayer. Estaba contento, estábamos contentos. Que la Justicia nos devuelva un pedacito de Tahiel y haga justicia”, dijo su madre Noelia en estado de shock frente a los medios. Y siguió: “Quiero que me devuelvan a mi hijo de 6 años. Tenía toda una vida por delante. Iba a primer grado”.
También se encontraba el abuelo de Tahiel quien reclamó: “Mataron a mi nietito. Yo me bajé del colectivo viniendo del laburo y los vi a los tres tirados en la calle. Que se haga justicia. Que paguen los asesinos”. Además, la familia del niño expresó que “buscan testigos que se puedan acercar a la fiscalía para acercar más pruebas contra los detenidos”.
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