La Policía Bonaerense detuvo esta tarde al llamado “jinete chorro” de Los Polvorines, el joven delincuente de 21 años cuyas imágenes montado a caballo robando a vecinos de esa localidad se hicieron virales en las últimas horas.
La detención ocurrió en Carlos Pellegrini al 5200. La Policía arrestó a Marcelo Ojeda mientras todavía cabalgaba por las calles. El joven fue acusado de robar varios celulares montado a un caballo. Su accionar quedó filmado por las cámaras de seguridad del municipio de Malvinas Argentinas, donde se observa cómo abordó a los vecinos para robarles.
En las insólitas imágenes se ve como Ojeda encapuchado y sobre el animal, sigue con cierto sigilo a una pareja. Los jóvenes, desprevenidos, no se percatan de que algunos metros detrás suyo estaba Ojeda.
Pasan los segundos y el caballo se acerca a la vereda hasta que finalmente los jóvenes logran darse cuenta y corren a toda velocidad en sentido contrario. En el medio, uno de ellos se tropieza y cae sobre la vereda. Mientras tanto, el ladrón trata de perseguirlos pero no puede hacer mucho: por pocos segundos la pareja logra esquivar de la situación, dobla la esquina y frustra las intenciones de Ojeda.
Pero Ojeda continua. A pesar de estar a plena luz del día y frente a las casas de los vecinos, el joven ladrón nuevamente intercepta a otra víctima. En las grabaciones se observa como un joven con una mochila fue abordado de un momento a otro por el delincuente. Su rápida reacción frustró el ataque de Ojeda.
Sin embargo, no es la primera vez que se conoce un caso de ladrones montados a un caballo. Hace casi un mes, en la localidad bonaerense de Pilar, dos sujetos montados asaltaron a un hombre. Como ocurrió en Los Polvorines, este episodio también quedó registrado por las cámaras de seguridad del Municipio. En las imágenes se ve claramente lo que pasó: los ladrones abordaron a un vecino y lo amedrentaron con los caballos.
En segundos, le quitaron su abrigo y un teléfono celular. Gracias a que la víctima escapó corriendo, evitó que le sacaran otros elementos personales. Como si nada, los jinetes, cada uno con su caballo, se perdieron en el interior de un predio. Uno de los presuntos ladrones fue detenido a los pocos días. Del otro, no se sabe nada.
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