A Danilo Santiago Nikisch lo mataron el domingo minutos después de las seis de la tarde en las calles de Resistencia, Chaco. Cayó tras recibir cinco disparos sobre la vereda de la avenida Lavalle al 900, donde se encuentra la pared lateral de una reconocida cadena de supermercados. Estaba desarmado y huía de su agresor, que llevaba una gorra oscura, una capucha negra, un barbijo blanco y un arma de fuego. Las cámaras de seguridad de los negocios de la zona –un área céntrica de la capital chaqueña– captaron el crimen y la fuga del asesino.
A las 18:30, agentes de la Comisaría Segunda de Resistencia llegaron al lugar del hecho, donde constataron que un joven con heridas en el torso yacía inmóvil en el suelo. Inmediatamente solicitaron la presencia de una ambulancia: cuando los médicos llegaron, Danilo había muerto a causa de los disparos.
Fuentes cercanas a la investigación le advirtieron a Infobae que para comprender el móvil del crimen hay que retrotraerse a la noche previa, la del sábado. Descartaron que se trate de un hecho de inseguridad, de un ajuste de cuentas entre bandas enfrentadas o una disputa por la comercialización de droga. Es, en sí, parte de una tendencia creciente en la Argentina: los conflictos entre personas resueltos con violencia extrema, peleas que terminan a puñaladas o disparos.
Las fuentes aseguran que hubo una discusión la noche del sábado en la casa del supuesto agresor, que vive a una cuadra del hogar de la víctima. Ambos eran vecinos del barrio Villa Odorico de la capital provincial.
El motivo de la pelea entre los vecinos es aún una incógnita. La tía de la víctima es Marcela Cortés, una jueza de faltas de la capital provincial. En diálogo con el programa Ciudad TV informó que a su sobrino lo habían golpeado, que tenía “la cara rota” y cortes en su piel producto del uso de arma blanca. “Le habían pegado y lo habían amenazado de que lo iban a matar. Lo echaron de ese lugar a los golpes”, agregó.
Una de las hipótesis que manejan los investigadores y que abonaron los familiares de la víctima es que ambos vecinos, que no eran amigos ni enemigos, estaban alcoholizados esa noche.
Danilo habría reaccionado por los golpes recibidos. Cuando se retiró de la pelea, le habría tirado un ladrillazo a un vehículo que sería propiedad de la madre o de un cliente del padre del presunto agresor. La doctora Nélida Villalba, a cargo de la Fiscalía N° 5 y quien dispuso que el peritaje de la escena lo realice el Gabinete Científico del Poder Judicial, ordenó el traslado del cuerpo al Instituto Médico de Ciencias Forenses y le confirmó a este medio que esa misma noche hubo una denuncia en la Comisaría Segunda por daños a la propiedad: Danilo Nikisch era el acusado y su presunto asesino, uno de los denunciantes. Medios locales también apuntan que hubo tres denuncias de distintos integrantes de la familia contra la misma persona por el mismo hecho.
Esa noche, Danilo se escondió en una gomería antes de regresar a su casa. Su tía declaró que los agresores lo estuvieron buscando todo el domingo durante la madrugada, la mañana y la tarde. Lo encontraron a las 18 horas, a pocas cuadras de su vivienda: la mujer contó que el agresor se bajó de un auto y lo corrió tres cuadras a Danilo hasta que uno de los disparos detuvo su huida. El joven, que no tenía armas ni cuchillos, cayó herido sobre la vereda de la avenida Lavalle al 900 y el asesino continuó su carrera ahora escapando del lugar. Todo quedó registrado en cámaras de seguridad de comercios de la zona.
La tía de la víctima expresó: “Este joven bajó del auto, lo siguió tres cuadras y disparó en plena avenida. A Danilo lo estaban buscando desde ayer. Es decir que hubo premeditación, alevosía y ensañamiento. Por eso pedimos justicia: fue un crimen atroz a una persona totalmente indefensa. No vamos a parar hasta que le den cadena perpetua al asesino”.
La fiscal Villalba informó que el agresor está identificado y que continúa prófugo, que la policía local lo está buscando intensamente. Asimismo reconoció la validez de la versión de que el asesino se entregaría en sede fiscal junto a un abogado. Ariel Acuña, jefe de la policía provincial, afirmó que se montó en las inmediaciones de la comisaría un operativo especial con personal de investigaciones y agentes atentos a esta hipótesis. Y confirmó que el principal sospechoso es Jonathan Jara, de 21 años, señalado como autor material del crimen. En el caso también están implicados otros dos jóvenes que habrían ayudado al agresor a escapar en un auto.
Se esperan en la tarde los resultados la autopsia, que podrían acreditar las teorías de la familia de la víctima, quienes aseguran que el cuerpo de Danilo, además de las heridas de arma de fuego, presenta lesiones de golpes y cortes sufridos la noche anterior.
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