Un hombre le escribió una carta abierta al ladrón que asaltó a su hermana para agradecerle que no la haya matado

A una comerciante le sustrajeron la recaudación del día y su hermano redactó un descargo en Facebook

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La fachada del negocio ubicado en una zona comercial de La Plata
La fachada del negocio ubicado en una zona comercial de La Plata

En La Plata, ayer por la tarde una mujer fue víctima de un robo en uno de los dos comercios de indumentaria deportiva que tiene junto a su hermano. El hecho ocurrió en la calle 12, entre 63 y 64, en donde un joven llegó para consultar algunos precios y terminó apuntándole con un arma y llevándose el poco dinero que había en la caja.

Gastón Tocho, hermano de Soledad, mujer que sufrió el violento episodio, utilizó su cuenta de Facebook para redactar una “carta abierta a un ladrón”. En ella expresó: “Esperé un día para digerir el hecho que vivimos. Y ser muy cauto y consecuente con lo que expreso. No me queda otra que agradecerte por sólo robar y no llevarte la vida de mi hermana. Hoy puedo abrazarla, visitarla, reír y llorar con ella”, escribió el hombre.

Y continuó: “Ella puede ver a su familia y sobrinos por más que anoche sufrió el típico trauma. Hoy se despertó y pudo desayunar. ¿Cuántas personas no tienen este final feliz? ¿Cuántas personas se despiertan con su familiar hecho pancarta? ¿De quién es la culpa de ‘el ladrón? ¿Su entorno? ¿El Estado? ¿La droga? ¿El hambre? ¿Mía? ¿De mi hermana? ¿El COVID-19? ¿De quién?”.

El posteo que compartió el hermano de la víctima del robo
El posteo que compartió el hermano de la víctima del robo

Infobae se contactó con el comercio y dialogó con la mujer, quien durante la jornada del miércoles debió abrir el local y atenderlo junto a otra persona. Ella relató: “Estaba trabajando, eran las 17. Tengo el mostrador en la puertita porque nadie puede entrar. Llegó un hombre y estaba nervioso. Me preguntaba los precios de las camperas de adultos y me señalaba la ropa de chicos”.

Cuando Soledad se dio vuelta y regresó su mirada hacia el “cliente”, escuchó: “Calladita la boca, eh”. La mujer indicó: “Se levantó la remera y me mostró el arma. ’¡Dame la plata, dame la plata!’, me decía. Le dije que no la tenía encima, que la iba a buscar. ’¡No hagas movimientos raros!’, me gritó. Le di la plata, me moví para atrás y me obligó a que me tirara al suelo. Todo apuntándome con el arma”.

El delincuente se fue caminando. Cuando Soledad se repuso, salió del comercio y corrió a los gritos, buscando que los comerciantes de la zona la ayudaran a detener a la persona que segundos antes le había robado la recaudación del día.

La esquina en la cual ocurrió el robo
La esquina en la cual ocurrió el robo

Estoy shockeada, me levanté con la imagen de la secuencia. Al que me robó no lo había visto nunca”, detalló Soledad.

La carta de Gastón, su hermano, concluyó: “Nos pasa a todos. Personalmente, nos pasó varias veces. Siempre con final amargo pero con suerte de poder contarla. Quiero invitar el intendente Julio Garro, invitar al ministro de Seguridad Sergio Berni, a que se peguen una vuelta por los barrios, por las zonas comerciales. Que tengan la altura de ejecutar bien su trabajo. Tienen las herramientas y las fuerzas, el personal, si no sería una buena idea ceder su puesto a quien sea competente. Y no hablo desde el lugar de víctima, ni con resentimiento ni enojo, hablo del lado humano”.

Ante este medio completó que, como medida preventiva, colocará cámaras de seguridad en el comercio: “No sé que más hacer. Imaginate que laburamos a puertas cerradas y nos roban igual”.

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