Fuentes de los organismos de seguridad confirmaron que en la noche de este sábado se encontró un cuerpo en la zona de Villarino, cerca de Bahía Blanca. El cadáver se encontraba flotando en un canal de agua, por lo que enseguida se procedió a preservar la escena. Aún no fue indentificado, pero las autoridades investigan si se trata de Facundo Astudillo Castro, el joven que desapareció el 30 de abril pasado cuando salió de su casa en la ciudad de Pedro Luro para reencontrarse con su ex novia, con quien se había peleado recientemente.
Según las mismas fuentes, los restos hallados están en un avanzado estado de descomposición. Personal de la Policía Federal ya se encontraba trabajando en el lugar (por orden de la Justicia federal, no interviene la Bonaerense), aunque de todas formas esperarían a la luz del día para culminar con el proceso de identificación del cuerpo. Para ello, según le confirmaron a Infobae, el fiscal del caso, Santiago Ulpiano Martínez, convocó al Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), que ya llegó al lugar para participar del reconocimiento, al igual que el Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema.
El cadáver fue encontrado a al menos tres kilómetros de un puente ferroviario de la zona que había sido el foco de varias búsquedas, en un sector de bañados con distintas profundidades y sumamente complejo de transitar. Las fuerzas de seguridad comenzaron a rastrillar el lugar tras el aviso de lugareños, que vieron los restos flotando y se contactaron con las autoridades de inmediato. El organismo que se hará cargo de la identificación del cuerpo será el EAAF, en caso de constatar que la escena se conservó de manera adecuada.
“El hallazgo se produjo en la zona entre Cabeza de Buey y Cerri, donde se encontró un esqueleto completo, disecado, sobre la costa. Están por llegar los especialistas de Antropología Forense para realizar las pericias en las próximas horas. En el lugar se hicieron presentes el fiscal y la Policía Federal. Por ahora eso es todo lo que tenemos”, comentó al portal La Nueva el abogado Luciano Peretto, quien llegó al sitio junto a Cristina Castro, madre del joven desaparecido.
“Es una zona de mucho barro y greda, a la que nadie accede, nos hundíamos cuando estábamos ahí, contó esta mañana la mujer en diálogo con TN. “Recién hoy me voy a poder acercar con luz de día para ver si algo de todo lo que hay es de mi hijo y ahí poder decir si son los restos de Facu. Ayer no se veía absolutamente nada”.
“Me dolió mucho llegar allá y darme cuenta que el fiscal estaba hablando con el señor Sergio Berni. No me parece menor con las declaraciones que dio este señor”, expresó Cristina respecto a las comunicaciones de los investigadores con el Ministro de Seguridad bonaerense durante el operativo de anoche.
“Habían tomado una fotografía de los huesos y le dije al fiscal: ‘Espero que esa foto no ande dando vueltas por todos los canales de televisión. Yo me llego a enterar que esto aparece en los medios de Bahía Blanca y a usted le hago un juicio’”, remarcó la mujer, que ya había solicitado el apartamiento de Ulpiano Martínez por considerar que actúa con “parcialidad” y “serias” irregularidades en el proceso, lo cual fue desestimado por la jueza Marrón.
El otro integrante de la querella, Leandro Aparicio, precisó que el lugar del hallazgo “es un salitral”, por lo que “muchas veces que se depositan cuerpos” en zonas con estas características “se momifican”, aunque aclaró que “en este caso eso no pasó porque hay mucha humedad”. También remarcó que, por las características del lugar, “nadie puede ir voluntariamente a morirse o ahogarse ahí” y reforzó la hipótesis de que el cuerpo “está plantado” ahí.
“No pudimos ver mucho porque las condiciones no lo permitían. A primera hora llega el Equipo Argentino de Antropología Forense. De lo que yo vi, no se puede identificar la ropa. Es un lugar muy particular porque es muy difícil de transitar, en un sector que se llama Villarino Viejo. Para nosotros, si es que este es el cuerpo de él, no llegó Facundo voluntariamente hasta ahí. Fue puesto”, agregó el letrado.
“Al fiscal lo vamos a denunciar y al ministro Berni estamos analizando de también denunciarlo porque es un encubridor. Tiene que sacar a la policía que está sospechada pero él dice que no encontró ninguna irregularidad”, señaló además el abogado querellante.
El punto donde encontraron el cadáver es cercano al camino de las vías del ferrocarril que va a la localidad de General Cerri, a 14 kilómetros de donde la “Testigo H”, la mujer que declaró haberle dado un aventón a Astudillo Castro, dijo que lo dejó. Ese relato, que alejaba la versión de una desaparición forzada, fue fuertemente cuestionado por la querella.
“Mamá, vos no tenés idea dónde estoy, no me vas a volver a ver más”, le dijo a su madre el joven de 22 años poco después de las 13 horas de aquel 30 de abril, en la última comunicación que se le conoce desde que salió de su casa ubicada en la ciudad de Pedro Luro.
Ese día, el muchacho había decidido romper el aislamiento social, preventivo y obligatorio para llegar a dedo hasta Bahía Blanca con la intención de reencontrarse con su ex novia, con quien se había peleado recientemente.
Desde ese momento, la principal versión que se maneja es que Astudillo Castro habría sido detenido en la localidad de Mayor Buratovich, partido de Villarino, donde presuntamente le labraron dos actas por haber violado la cuarentena, pero hasta ahora no se sabe con precisión qué pasó con él después de eso.
Su familia está convencida de que fue víctima de una “desaparición forzada” y que al menos nueve oficiales de la Policía Bonaerense desplegaron un plan de encubrimiento que incluye “demoras en los rastrillajes, pistas falsas y testigos truchos” a la causa, según denunció Aparicio al comienzo de la investigación.
“Nosotros tenemos tres testimonios que dicen que Facundo fue metido entre las 15.30 y las 16 a una camioneta de la policía. Y desde ahí no hay ningún testimonio concreto que desvirtúe esos tres testimonios”, explicó el letrado.
Este mismo sábado, el presidente Alberto Fernández aseguró que le encomendó a la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, que “extremen” los esfuerzos “para saber qué fue lo que pasó” con este joven y aseguró que su gestión será “inflexible” con la violencia institucional.
“Estoy hablando mucho con la mamá de Facundo y le he encomendado a la ministra de Seguridad que por favor extremen todo para saber qué fue lo que pasó. La Policía está para cuidarnos y no para ejercer violencia sobre nosotros o para hacer cosas peores sobre nosotros”, afirmó el mandatario nacional a radio La Red.
Un peritaje telefónico reveló la existencia de dos fotos del documento de identidad de Facundo en el teléfono de una agente bonaerense del Destacamento de Mayor Buratovich que lo interceptó el día de su desaparición, a pesar de que otros efectivos de esta misma fuerza declararon que el joven manifestó que llevaba una licencia de conducir como única identificación.
“Estaba en el teléfono de Jana Curuhinca y se contrapone con lo que dice el policía (Alberto) González, de Teniente Origone, que Facundo le dijo que no tenía DNI y sólo le mostró el carnet de conducir. Evidentemente hay una contradicción: o Facundo le mintió o González miente”, explicó el viernes el abogado Aparicio a la agencia Télam.
Por su parte, la madre del joven, Cristina Castro, sostuvo que no le “sorprendía” esa noticia, teniendo en cuenta “la sandía que apareció en (el partido de Teniente) Origone, en la comisaría”.
“Se quedaron con el celular de Facu, manga de ‘chorros’, tienen las pertenencias de Facu y van a caer de a uno”, fue el último mensaje que escribió la mujer en su cuenta de Twitter.
Días atrás, la jueza federal de Bahía Blanca María Gabriela Marrón, que lleva adelante el caso, rechazó el pedido de la familia de Astudillo Castro de que se detenga a los policías bonaerenses Mario Gabriel Sosa, Jana Curuhinca, Alberto González y Siomara Flores, que son los que estarían involucrados en el hecho.
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