La escenografía no es la más común para un video de Tik Tok, la red social de pequeñas filmaciones altamente popular entre niños y adolescentes. La imagen muestra un ambiente muy chico con una letrina en el fondo, paredes descascaradas con posters de mujeres desnudas, cuatro y hasta cinco personas juntas, cuchetas con varias frazadas, cortinas de baño en lugar de puertas y barrotes en las ventanas.
Parece la celda de una cárcel… y lo es.
La celda pertenece, precisamente, a la Unidad 24 de Florencia Varela donde dos detenidos se convirtieron en inusuales influencers con videos realizados de manera ilegal desde el penal bonaerense. Los más activos son los usuarios “Crisss59” y “Ale666” que entre los dos suman casi 60 mil seguidores y varias causas penales. En sus videos, realizan playback de canciones de Bad Bunny entre efectos de brillos, se filman mientras se tatúan entre ellos: “Ale” tiene el cuerpo casi cubierto con diseños, algunos recientes y de buena calidad, que desafían al tradicional tatuaje tumbero de punzón manchado en tinta china. También transmiten en vivo: saludan a seguidores de todo el país, responden preguntas sobre la vida en prisión, o la vida en delincuencia. No reivindican su pasado, por otra parte.
Estos dos usuarios son lo más activos y populares en el nuevo circuito tiktoker tumbero, pero no son los únicos presos que navegan por el novedoso mundo. Un rápido recorrido por la red social de origen chino, es suficiente para encontrar decenas de perfiles de presidiarios que suben videos desde las celdas, los pabellones y hasta del patio de la cárcel. Pueden tener teléfonos, pero no para Tik Tok.
Si bien a finales de marzo la Cámara de Casación Penal Bonaerense autorizó el uso de celulares para que los presos pudieran comunicarse con sus familiares en medio de la pandemia tras la prohibición de las visitas a los penales. la utilización de redes sociales no fue permitida. Incluso se especificó que solamente podían utilizar el WhatsApp para hablar con sus allegados.
La mayoría de las cuentas de los presos fueron abiertas entre mayo y junio de este año. Los videos son de los más variados pero por lo general siguen la misma estética y forma que los que están de moda, el formato Tik Tok usual. Los detenidos, casi siempre desde la celda, imitan al cantante puertorriqueño Bad Bunny, le ponen actuación a los audios más conocidos y hasta se graban mientras se tatúan entre ellos. Otros utilizan los videos para saciar la curiosidad de sus seguidores, que en su gran mayoría, en los comentarios, les preguntan por “cómo es la cárcel por dentro”. Ellos cumplen y graban, a escondidas y a veces no tanto, las instalaciones de la Unidad.
Las transmisiones en vivo son otra historia, algo inédito en el sistema penitenciario bonaerense. Un teléfono clandestino y Tik Tok lo hicieron posible.
“Gracias gente por unirse, por estar ahí del otro lado, por sus comentarios y por sus likes”, fue el saludo inicial. Recién comenzaba la tarde del jueves cuando “Crissss59”, comenzó su vivo desde la Unidad N° 24 de Florencio Varela para hablar con sus seguidores. Rápidamente empezaron a sumarse decenas de tiktokers de todas partes del país que empezaron a interactuar con él.
“Crisss59″ contó su historia frente al teléfono. Cristian, su nombre verdadero, está preso por robo, según él mismo tiene 31 años, es oriundo de San Martín e hincha de Chacarita. El prontuario por el cual esta tras las rejas es abultado: robo calificado, resistencia a la autoridad, violación de domicilio y tentativa de homicidio.
“K-po, saludos desde el Chaco”, “¿por qué estas detenido”, “ay, mi amor”, “Saludos desde San Juan”, tirate un paso”, “saludos desde San Francisco, Córdoba”, son algunos de los comentarios que, en vivo, los seguidores le escribían a Cristian mientras él respondía. También fumaba marihuana mientras lo hacía pero se cuidaba de que no se vea en cámara para que la red social no le suspenda la transmisión, según el mismo contó, otro contrabando clandestino.
A los 15 minutos de comenzado el vivo, uno de los usuarios que lo sigue le sugirió que podía ganar plata convirtiéndose en influencer, dada su cantidad de seguidores, quizás hacer promoción de algún producto por canje: “Yo no hago esto para cobrar plata pero no me vendrían nada mal unos pesitos hoy en día. Yo esto lo hago para divertirme, para conocer nueva gente y también para contarles mi historia. Para que me cuenten un poco de la suya también”, le contestó.
Fuentes del Servicio Penitenciario Bonaerense confirmaron a Infobae que las autoridades de la Unidad 24 de Varela que sancionaron al detenido y le secuestraron el celular: era uno de los teléfonos que estaban habilitados por el Estado para que hablen con sus familias.
“Ale666_7” también está detenido por robo y es pasa su encierro en la misma celda que Cristian. Tiene más de 28 mil seguidores y horas después de la sanción a su compañero hizo también una trasmisión en vivo, donde apareció junto a Cristian.
Según datos oficiales del SPB, existen 20 mil celulares registrados de manera oficial que sólo tienen permitido ser utilizados para usar WhatsApp con el objetivo comunicarse con sus familias, que tienen la visita al penal suspendida por la pandemia.
“Hasta el momento hemos tenido sólo 15 denuncias por infracciones. Automáticamente cuando se comprueba que infligen la norma se los sanciona y se les retira el celular. Estamos permanentemente atentos a que los celulares se utilicen como corresponde pero tampoco podemos controlar uno por uno. Por eso cuando lo detectamos, actuamos”, indican fuentes del servicio penitenciario a este medio.
Más allá de que está prohibido lo que hicieron y es una infracción a la normal, en la última transmisión en vivo que hicieron aprovecharon para dejar un mensaje a sus miles de seguidores: “Para todos los que nos están viendo esta tarde, robar no es bueno, no es bueno estar en estos lugares, no es lindo estar en la cárcel. Cuiden a sus familias, no salgan a delincuentear, no se porten mal y trabajen”.
Seguí leyendo: