La sala IV de la Cámara de Casación Penal ratificó las condenas en una causa que se inició en 2013 con el secuestro y la quema de 583 kilos de cocaína, propios de una temible banda conocida por transportar la droga a través de avionetas.
La banda fue desarticulada el 23 de octubre de 2013 en diversos allanamientos realizados en Buenos Aires, Córdoba, Tucumán y Santiago del Estero. Sergio Berni, por aquel entonces secretario de Seguridad de la Nación, había afirmado: “Es la mayor comercializadora de drogas en la Argentina”.
La decisión fue dictada con los votos de los titulares de la sala, los doctores Mariano Hernán Borinsky, Javier Carbajo y Gustavo M. Hornos. Por unanimidad confirmaron la sentencia condenatoria del Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 1 de Salta, la cual le impuso al líder de la banda, Claudio Alejandro “Gallo” Andrada, la pena de 18 años de prisión por ser autor y organizador del delito de transporte de estupefaciente agravado por la participación organizada de tres o más personas para cometerlo.
Además, se confirmaron las condenas de Carlos Dante Acuña, Aldo Javier Velázquez, Oscar Alfredo Dorao, Raúl Eduardo Juárez, Juan Fabián Volker y Fortunato Carlos Heredia a las penas que oscilan entre 9 y 14 años de prisión por el delito de transporte de estupefacientes.
Por otra parte, se anularon las absoluciones de Ramón Rafael Peralta, Mario Alberto Cejas y Alejandro Fabián Schwindt y, en minoría, el doctor Hornos resolvió que correspondía condenarlos en esa instancia como participes necesarios del delito de transporte de estupefacientes agravado por la intervención de tres o más personas.
“Escapa a toda lógica entender que dichos sujetos fueron ajenos a una operatoria de semejante calibre, mientras sus compañeros de banda realizaban distintas tareas a tal fin, como ser viajes a distintos lugares del país, y que desconocían lo que realmente tramó la organización durante casi todo el año 2013″, destacó Hornos.
“Se encuentra demostrado que cada uno de los integrantes de la organización delictual ejercía un rol particular. Es más, las comunicaciones y reuniones que mantuvieron los días previos con los otros integrantes son claros indicios de que participaron de la operación”, agregó.
Andrada es oriundo de Santiago del Estero y estuvo detenido en una causa por narcotráfico en 1996. Tras ser excarcelado, se había radicado en una lujosa casa de Martínez, provincia de Buenos Aires. En 2004, volvió a ser noticia luego de que su padre, Leonardo Andrada, fuera secuestrado y posteriormente liberado tras el pago de USD 270 mil.
El operativo que detuvo a toda la banda se llamó “Octubre Blanco”. En el trabajo previo de inteligencia se detectó que la cocaína secuestrada iba a ser acopiada en galpones en la localidad bonaerense de José C. Paz para luego ser distribuida entre bandas minoristas de narcos de la provincia de Buenos Aires y de la Ciudad.
“Todo se dio en 48 horas y terminó muy bien. Debo agradecer el trabajo de la jueza (Sandra) Arroyo Salgado por facilitar todas las herramientas para llegar a desbaratar a esta banda”, sostuvo Berni hace siete años, previo a quema de lo incautado.
“Andrada comandaba una banda muy peligrosa y muy profesionalizada, que había adoptado medidas de contra inteligencia y la única posibilidad que tuvimos en la investigación fue a través de un importante operativo con gendarmes desplegados en observación de los terrenos donde se suponía que operaban”, reveló el actual ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires el 25 de octubre de 2013 en una conferencia de prensa.
Según el funcionario nacional, en los operativos trabajaron unos 150 gendarmes, “muchos de los cuales venían haciendo trabajos encubiertos en los montes de Santiago del Estero, Tucumán y Córdoba”. Los delincuentes escondieron los 583,239 kilos en el entretecho de un camión Mercedes Benz Sprinter. El espacio tenía aislación térmica y un sistema de apertura hidráulica. La droga fue ocultada en Salta y la banda había recibido el producto desde Bolivia, según precisaron los investigadores durante aquellos años.
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