El duro relato del adiestrador del perro que encontró un objeto de Facundo Castro en la comisaría: “Su mamá quedó muy impactada”

El viernes pasado, en medio de un operativo por la búsqueda de Facundo Astudillo Castro, fue encontrado un objeto en el destacamento policial de Teniente Origone -donde la Policía Bonaerense había afirmado que nunca estuvo- que podría pertenecer al joven de 22 años que fue visto por última vez el 30 de abril pasado cuando hacía dedo por la Ruta 3 con supuesto destino a Bahía Blanca y es buscado desde entonces.

Se trata de una esfera de madera pintada como una sandía que en su interior contiene una vaquita de San Antonio, también de madera, que fue encontrada en un antiguo calabozo de la comisaría por el perro entrenado del perito Marcos Herrero, puesto por la querella, que solicitó el procedimiento que fue aceptado por el fiscal federal Santiago Ulpiano Martínez.

El hallazgo trascendió este lunes luego de que la madre de Facundo, Cristina Castro, lo divulgara a la prensa y fue confirmado a Infobae por fuentes de la investigación y el abogado de la familia, Leandro Aparicio. De la misma inspección participaron también perros de la División K9 de la Policía Federal y de Prefectura que, según indicaron fuentes del caso, no detectaron ningún rastro cadavérico relacionado con Facundo.

El adiestrador Marcos Herrero, quien ya había asegurado que los perros “marcaron” a Facundo en un patrullero, contó esta mañana cómo fue el descubrimiento y dio detalles del operativo.

“Una vez que estuvieron todas las partes, inclusive mi persona como perito, la mamá de Facundo, Cristina, y el doctor Luciano Peretto [también abogado de la familia] se dio la actuación al empleado policial que estaba en ese momento, que está ahí hace 15 días y no tuvo inconveniente en permitir el allanamiento”, explicó Herrero. “Se hizo por tres etapas: primero pasaron los perros de cinotecnia del Gobierno, después los perros de la Policía Federal y por último mi persona”. El procedimiento, además, fue filmado y se tomaron fotografías. Cristina, en tanto, esperó los resultados fuera de la comisaría.

Una vez adentro, según explicó el especialista en diálogo con el programa Ahora Dicen, que se emite en Futurock FM, Yatel, el perro entrenado, trabaja suelto cuando Herrero da la orden luego de una toma de olor que se hace a partir de un cuellito de color negro que la madre aportó a la Justicia con ese fin. “El perro lo identifica no solamente en su olfato, sino también en el cerebro y puede reconocer mínimos detalles de la esencia de la persona”, explicó el adiestrador.

El perro, además, busca también rastros de sangre o restos biológicos. “Perdón con lo que digo, pero Cristina lo tiene bien asumido y también lo hemos hablado muchas veces por la cantidad de días que van de búsqueda, de que está también la posibilidad de que Facundo esté sin vida”, señaló el experto.

“Yo le hago el señalamiento a Yatel y él empieza a buscar dentro de ese perímetro que está cerrado con un alambre tejido pero se introduce en la oficina y en cada habitáculo hasta que termina todo ese perímetro, vuelve a salir afuera, recorre el patio y centra su atención sobre lo que viene a ser una celda, un calabozo antiguo en mal estado, que ahora lo utilizan como un almacenamiento de basura”, relató Herrero.

En ese momento, como la puerta estaba cerrada con alambre, los efectivos debieron abrirla para que el perro siguiera inspeccionando la habitación hasta que en un momento empezó a ladrar “aproximadamente entre siete y diez veces” y comenzó a “literalmente descartar la basura” en búsqueda de un objeto específico. En ese momento, entre los escombros, Yatel tomó con su boca una bolsa transparente de arranque y lo llevó hasta los pies de su entrenador.

“Para determinar su función, yo decidí sacarlo al perro del perímetro, el policía tomó la bolsa, la puso en otro lugar y cuando vuelvo a soltar a Yatel él vuelve a identificar y reconocer el elemento ladrando. Fue muy decidido y no paraba de ladrar por toda la habitación”, contó el adiestrador. “Se ve que ese lugar sólo lo abren y cierran para arrojar basura. Se puede ver por la basura que estaba y la bolsa que detectó Yatel, que estaba en un estado de descomposición. Cuando se abrió la bolsa tenía mucho olor e inundó toda la habitación”.

En ese momento, como se habían escuchado los ladridos desde afuera, se permitió a la madre de Facundo ingresar a verlos. Dentro de la bolsa estaba la cajita de madera junto a un paquete de cigarrillos en estado de putrefacción.

“También había otras marcas que a primera vista pueden ser de sangre, eso lo tendrá que determinar Policía Científica. Pero el detalle que destacó Cristina era este objeto, este recuerdo que le había dado su abuela cuando falleció hace 8 años”, remarcó Herrero. “Si bien yo trabajo con el perro y soy el guía me sorprendió la calidad técnica del perro para rápidamente detectar e identificarlo y lo más impactante es que el perro empezó a revolver y a discriminar la bolsa, que la sacó con la boca y la acercó a nuestros pies”.

“Cuando vi el regalo de mi mamá que le había hecho a mi hijo, casi me muero”, expresó la madre de Facundo este lunes, tras lo cual insistió en su reclamo de que su hijo fue víctima de una desaparición forzada por parte de efectivos policiales. “Esta gente (por los policías del Destacamento de Origone) me dijo que lo dejó seguir y hoy encuentro esto acá”, dijo la mujer en referencia al objeto que, según dijo, le pertenecía a su hijo y que “lo tenía desde el día que se murió mi mamá y lo llevaba siempre con él”.

“Estaba partida, la vaquita de San Antonio estaba en otro lugar, tenía como una secreción verde y lo que puede ser a primera vista manchas hemáticas, de sangre. Cristina quedó muy impactada y lo reconoció de inmediato”, remarcó el adiestrador. “La madre no solo reconoció el objeto, sino que cuando lo vio adelantó que en su interior había una vaquita San Antonio”, dijo Leandro Aparicio a este medio, y anticipó que pedirán nuevas detenciones “porque entendemos que en esta desaparición forzosa hubo un plan entre policías y civiles para desviar la investigación desde un principio”.

El objeto hallado será sometido a una pericia en las próximas horas para establecer si hay restos cadavéricos. En caso de que diera positivo, será remitido al Cuerpo Médico Forense para hacer un estudio de ADN con el resto de las muestras de los involucrados en el caso, incluida la mamá de Facundo.

Lo último que se supo de Facundo es que salió de su casa de Pedro Luro el 30 de abril para ir a ver a su ex novia en Bahía Blanca, en plena cuarentena estricta, y que fue advertido en un retén policial en el que le labraron un acta por haber violado el aislamiento social y fue llevado a la comisaría de Mayor Buratovich. Según testimonios de los policías, lo dejaron seguir. Según la pista que sigue su madre, entre las 15.30 y 16 de ese mismo día, el joven fue nuevamente interceptado por efectivos que lo introdujeron en una patrulla y, desde ese momento, nada más se supo de él.

“Esta nueva prueba en la causa por desaparición forzada, que tramita en el Juzgado Federal N 2 de Bahía Blanca, vuelve a poner en el centro de la investigación la participación de la Policía de la provincia de Buenos Aires en el hecho. El objeto encontrado en la dependencia policial confronta con las declaraciones de los efectivos policiales que nunca informaron haber trasladado a Facundo a la comisaría”, remarcó en un comunicado la Comisión Provincial por la Memoria.

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