La Organización de Naciones Unidas (ONU) le pidió al Estado argentino “inmediatez y exhaustividad” en la investigación por la desaparición de Facundo Astudillo Castro, el joven de 22 años que fue visto por última vez el pasado 30 de abril después de ser demorado en un retén policial mientras iba a dedo a lo de su ex pareja en Bahía Blanca, lugar al que nunca llegó.
A través de su Comité contra la Desaparición Forzada, el organismo solicitó “la independencia de los profesionales intervinientes” y que se tengan “en cuenta todas las hipótesis posibles”, además de “brindar medidas cautelares para la protección de los testigos que declararon en la causa”.
Esta acción se produjo luego de un pedido realizado la semana pasada por la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), que reclamó su intervención. A raíz de esa solicitud, la ONU emitió ayer una comunicación destinada al Estado argentino en la cual expresó que “de conformidad con la información remitida al Comité, con base en las declaraciones de testigos y en las contradicciones en los relatos de los agentes policiales de la provincia de Buenos Aires, se presume que esta fuerza estatal podría estar involucrada en la desaparición de Facundo”.
Por este motivo, exigió que se garantice el cumplimiento de “los requisitos de la debida diligencia para todas las etapas del proceso (incluyendo oficiosidad, inmediatez y exhaustividad de la investigación, así como también asegurando la competencia e independencia de los profesionales intervinientes)”, según el comunicado dado a conocer por la CPM.
Entre las medidas solicitadas, la ONU pidió por “una estrategia integral que incluya un plan de acción y un cronograma que tome en cuenta todas las hipótesis disponibles”. Y para llevar eso a cabo, recomendó incorporar a la búsqueda a la familia de la víctima y a sus representantes y, al mismo tiempo, garantizar su acceso directo a toda la información que surja de la investigación en curso.
Considerando la urgencia y gravedad de los hechos denunciados, “el organismo manifestó además su temor respecto de posibles represalias contra algunos de los testigos que declararon en la causa y cuyos testimonios ponen el foco en la responsabilidad policial”, contaron desde la CPM. En este sentido, solicitó medidas cautelares de protección para preservar sus vidas e integridad personal.
“Ahora el Estado argentino debe responder a la brevedad para informar respecto de este pedido y las medidas tomadas en consecuencia. De hacerlas efectivas, estará dando un paso importante para garantizar el avance de una investigación independiente, ágil y eficaz que permita finalmente saber dónde está y qué pasó con Facundo”, indicaron desde la CPM, que se presentó como querellante en la causa.
La causa, tras una declaración de incompetencia del fiscal provincial Pedro de Lucía, investigador inicial del expediente, está en manos de la Justicia federal de Bahía Blanca, con la jueza María Florencia Marrón y el fiscal Santiago Martínez.
Cuatro efectivos de la Policía Bonaerense están en el eje de la sospecha después de contradicciones en sus declaraciones. Según la querella, en sus indagatorias los policías aseguraron haber visto a Facundo en la localidad de Mayor Buratovich y después en Teniente Origone. Incluso uno de los policías afirmó que una camioneta lo levantó y salió en dirección a Bahía Blanca; pero cuatro días después, cambió su testimonio y dijo que, en realidad, se fue a pie.
“A lo largo de todo este mes fuimos manoseados de todas las maneras. Policías que decían una cosa en la comisaría y después declaraban otra cosa ante la Justicia. Demoras en las búsquedas. Yo estoy cansada y con mucha rabia. Quiero que aparezca mi hijo, que lo encuentren vivo o muerto, pero que aparezca”, se lamentó Cristina, la madre de Facundo, en diálogo con Infobae.
La investigación de maneja en un estricto hermetismo. Por lo pronto, se esperan las pericias realizadas por la Policía Federal Argentina a un patrullero, en el que buscan rastros de ADN y sangre, y a los teléfonos celulares de los agentes sospechados y sus equipos de trunking para comunicaciones de radio, como así también a registros internos y libros de anotaciones. Todo el material fue secuestrado en un allanamiento a la seccional policial de Buratovich.
SEGUÍ LEYENDO: