El ex boxeador Enzo Walter Gauna fue condenado este jueves a prisión perpetua por el femicidio de su pareja, Valeria Coggiola, asesinada a puñaladas en 2019 en su casa de la ciudad pampeana de General Pico. En el juicio, llevado a cabo a puertas cerradas por el protocolo sanitario enmarcado en la lucha contra el coronavirus, la Secretaría de la Mujer provincial actuó como querellante por primera vez en un caso de este tipo.
El condenado fue hallado culpable del delito de “homicidio doblemente agravado por haber sido cometido contra la persona con la que mantenía una relación de pareja, por haber sido cometido contra una mujer y cuando el hecho es perpetrado por un hombre y mediare violencia de género”, en perjuicio de su pareja.
La sentencia fue dada a conocer por el tribunal presidido por el juez Marcelo Pagano e integrado por sus colegas María José Gianinetto y Carlos Pellegrino.
El fallo coincidió con lo solicitado en la etapa de alegatos por el fiscal Guillermo Komarofsky y la Secretaría de la Mujer provincial.
“Sin dudas se llevó adelante un gran trabajo del equipo que se formó entre la fiscalía y nuestras abogadas, Silvana Abraham y Flavia Rubin. Esta condena marca sin dudas el compromiso por parte del Estado pampeano en el constante trabajo para eliminar la violencia contra las mujeres”, dijo tras el fallo la titular de dicha secretaría, Liliana Robledo. “Por supuesto esperamos que esto traiga un poco de consuelo a la familia de Valeria, en especial a sus hijos", agregó.
Todas las audiencias del debate se llevaron a cabo a puertas cerradas para respetar el protocolo sanitario ante la pandemia de coronavirus, por lo que dentro del recinto todos los presentes, incluso el ahora condenado, debieron utilizar barbijos.
“La cuchilla estaba en la mesita de luz y la ataqué. A partir de ahí no me acuerdo nada más, ni cuántas puñaladas le pegué. Me enteré de cuántas fueron por el diario”, declaró Gauna durante el juicio, en el que tuvo como defensor a Gastón Gómez.
En tanto, en el debate declararon amigos que la víctima y el acusado tenían en común: coincidieron en que Gauna estaba enojado con su pareja porque días antes del crimen ella se había practicado un aborto en el hospital y no sabía si estaba embarazada de él o de otro hombre.
“Lo que me está pasando por la cabeza es ir a limpiarla, no tengo nada que perder a esta altura”, dijo uno de los testigos que le confesó el ex boxeador, quien en un primer momento se había negado a declarar y luego le pidió "perdón a toda la familia”.
Coggiola fue asesinada de 16 puñaladas la madrugada del domingo 25 de junio de 2019 en su domicilio de General Pico, unos 135 kilómetros al norte de Santa Rosa, La Pampa, donde residía con sus hijos de 3, 12 y 13 años.
Por su parte, Gauna era la pareja de la víctima al momento del hecho, aunque no el padre de los tres chicos.
De acuerdo a la investigación, el ataque ocurrió alrededor de las 4 de aquel día en la casa ubicada en calle 106, entre 23 y 25, del barrio El Molino de la citada localidad, donde la víctima se encontraba junto a Gauna.
Una hora después de cometido el crimen de Coggiola, el hombre se trasladó con su ropa aparentemente manchada con sangre hasta la vecina localidad de Catriló, donde reside, y una vez allí le confesó a un familiar lo que había hecho.
Ante esta situación, el familiar realizó luego la denuncia a la Policía, por lo que efectivos de la fuerza y funcionarios judiciales se trasladaron hasta la vivienda de la víctima, donde encontraron el cadáver de la mujer y también el cuchillo con el que la había apuñalado.
Mientras tanto, Gauna fue detenido por la Policía en Catriló y puesto a disposición de la Justicia.
De acuerdo a la pesquisa, al momento del crimen los tres hijos de la mujer dormían en otra habitación de la misma vivienda y comenzaron a gritar cuando fue hallado el cuerpo, tras lo que fueron retirados del lugar, puestos al cuidado de su abuela materna y bajo contención profesional.
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