Anoche, Rubén Sarso llegó hasta el barrio porteño de Flores en compañía de un cómplice y a la altura de la calle Pedernera al 900 comenzó a robar las ruedas de uno de los autos que estaban estacionados sobre la cuadra. La pareja de ladrones quería aprovechar la soledad que se vive por estos días de cuarentena y dar el golpe, pero el cálculo les salió mal: una agente de la Policía de la Ciudad apareció en escena y luego de dar la voz de alto, según información de la causa, uno de los dos ladrones entró en su camioneta y extrajo un arma para intentar disparar. El vehículo arrancó y los delincuentes intentaron fugarse.
Así, la oficial efectuó un disparo que impactó directo en la cabeza de Sarso, el conductor del vehículo.
Sarso, un hombre de 30 años con pedido de captura por un asalto anterior, murió en el lugar.
Fuentes policiales confirmaron a Infobae que todo ocurrió cerca de la 20:30, en la esquina de Perdernera con la calle Ignacio Rodríguez, casi debajo de la Autopista 25 de Mayo. Después de que la policía les exigió que se detuvieran, el cómplice se subió a la parte trasera de la camioneta Renault Sandero en la que habían llegado hasta el lugar, mientras Sarso, que estaba en el asiento del conductor, quiso acelerar el vehículo y escapar.
En ese momento, la uniformada se acercó a la camioneta y aparentemente vio cómo el hombre que estaba en la parte de atrás tuvo intenciones de sacar un arma a través de una de las ventanillas. Fue entonces que disparó y le dio justo en la cabeza al delincuente que manejaba el auto. La Sandero apenas pudo avanzar unos metros y chocó contra un árbol.
El otro de los delincuentes fue atrapado mientras que por orden del Juzgado Criminal y Correccional N° 10, cargo del doctor Fernando Caudeno, la oficial de la policía porteña también quedó detenida y ahora acusada de “homicidio”. En este momento, se esperaba que la efectivo brinde declaración ante el magistrado.
De acuerdo con las pericias balísticas, que fueron llevadas a cabo por personal de Gendarmería, en el lugar sólo se disparó un tiro: el de la agente de la fuerza de seguridad. “Su cargador estaba lleno, usó la bala en recámara”, dijo una fuente a este medio. Asimismo, Infobae supo que Sarso enfrentaba un pedido de captura por un caso de robo a mano armada, en una causa que tramita el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 58.
Respecto de las medidas de prueba, el juez Caudeno ordenó tomar declaración a testigos, relevamiento de cámaras de seguridad públicas y privadas, averiguación de antecedentes del cómplice que no logró escapar y secuestro de la Renault Sandero para saber si tiene pedido de secuestro. Además, espera los resultados de la autopsia del ladrón muerto y del dermotest para constatar deflagración de pólvora, con el fin de saber si hay señales de que alguno de los delincuentes haya disparado.
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