En la imagen se lo ve a uno de los detenidos mientras habla a cámara con un barbijo y rodeado de más compañeros de pabellón con las bocas tapadas. "Hasta acá llegó lo pacífico que veníamos”, dice mientras mira fijo al celular que lo filma. El video se grabó en la Unidad N°13 de Junín. Y los términos son duros.
"Les avisamos a las autoridad del SPB, al Gobierno, que se preparan para el mayor conflicto de la provincia de Buenos Aires en una cárcel ", alerta. Aunque hasta ahora, según informaron, el conflicto fue apaciguado.
La situación dentro de los penales bonaerenses desde que se conoció el primer preso con coronavirus se tensa cada día más. Ayer, un grupo de detenidos en la Unidad N°10 de Melchor Romero salieron de sus celdas y tomaron los techos del penal, hoy pocas horas atrás otro enfrentamiento violento se desató entre dos grupos de detenidos en el penal número N° 23 del complejo carcelario de Florencio Varela, que terminó con un muerto. Mientras, ayer defensores generales bonaerenses le pidieron a Axel Kicillof que conmute penas de cientos de detenidos. Los reclamos son varios: más cuidados contra el contagio del virus, recuperar beneficios, salir de la cárcel, con más de 300 detenidos que se declararon formalmente en huelga de hambre en la provincia.
Pero los presos en Junín decían otra cosa.
“Como todos saben el conflicto que está en las cárceles, les decimos que acá están trayendo presos de todo el conurbano y no respetan la cuarentena”, denuncia el hombre que está vestido con una campera azul y pantalón negro.
Y sigue: “Acá no se están respetando las medidas que marcó el Ministerio de Salud. Anoche hubo ingresos (de más presos). Hasta acá llegó lo pacifico que veníamos. No queremos que la gente que está afuera lo teme como una amenaza. Fuimos los primeros que tomamos conciencia social con el tema de coronavirus. No nos están respetando. Tenemos miedo de infectarnos. No nos queremos morir acá adentro”, dice
“Les avisamos a las autoridad del SPB, al Gobierno, que se preparan para el mayor conflicto de la provincia de Buenos Aires en una cárcel como esta que tiene el doble población. Así que, todos juntos, les queremos decir que no nos queremos morir”, concluye la filmación con todos los presos que gritan al mismo tiempo: “No nos queremos morir".
Según información del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), el conflicto quedó apaciguado tras una mesa de diálogo. Como se observa en el video, los detenidos tienen miedo a que ingrese el virus al penal y ante ese temor le reclaman a las autoridades que no realicen más traslados a esa cárcel.
Según el diario La Verdad de Junín, mediante una resolución firmada ayer por el juez de ejecución penal Silvio Galdeano, se ordena el cese de traslados de internos a las cárceles de Junín, hasta tanto dure el `Aislamiento social preventivo y obligatorio´ decretado por el gobierno nacional.
En los últimos días, alrededor de seis internos llegaron a las unidades de esa ciudad prevenientes de zonas como Moreno, Florencio Varela y Morón en donde actualmente hay circulación comunitaria del coronavirus.
El intendente de Junín, Pablo Petrecca, también mostró su enojo con la determinación del ministerio de Justicia de la provincia de Buenos Aires de enviar reclusos a la cárcel de Junín. "Me comuniqué con las autoridades provinciales para manifestarle mi rotundo rechazo al envío de reclusos a Junín provenientes de cárceles ubicadas en zonas con circulación comunitaria de COVID-19”, tuiteó el funcionario.
El video se da en un contexto en que los conflictos dentro de los penales aparecen como en dominó desde que se confirmó el primer caso de COVID-19 en la Unidad N°42 de Florencio Varela. El detenido es Julián Arakaki, de 49 años, condenado a cadena perpetua por el delito de homicidio agravado por el vínculo: asesinó a su propia hija de 8 años. Arakaki se recupera: ya no tiene fiebre y respira sin asistencia.
Ante esto, ayer un grupo de defensores generales, que dependen de la Procuración bonaerense, le reclamaron, con un carta, al gobernador Axel Kicillof que conmute penas a distintos presos de penales bonaerenses. Luego de que 341 internos alojados en cárceles bonaerenses iniciaron una huelga de hambre pacífica para reclamar al Poder Judicial morigeraciones en los cumplimientos de la pena en el marco de la crisis sanitaria desatada por el coronavirus.
En el escrito, los defensores, de 19 distritos de la provincia, que son los representantes de todos los defensor oficiales de cada jurisdicción, reclaman que se libere bajo un “indulto” a quienes tengan condenas firmes que se vencen en el transcurso del año y quienes con condena firme tengan penas que no superen los años años de prisión y que durante el 2020 cumplieron o lo hagan con el requisito de acceder a la libertad condicional. Ese universo, según cálculos extraoficiales de los defensores, alcanzaría a unas cinco mil personas.
Desde la Gobernación bonaerense sostuvieron que el pedido de los defensores “es un tema que tiene que resolver el Poder Judicial más allá de que la Constitución lo prevea, no es un tema en el que vaya a intervenir el Ejecutivo”. Y agregaron que aún no se respondió oficialmente, pero que se “desestimó por improcedente”.
Seguí leyendo: