Emiliano Alarcón, de 22 años, falleció el domingo pasado mientras estaba detenido en un calabozo de la Comisaría 1° de San Justo, en La Matanza. Murió en una celda sobrepoblada. Sus síntomas eran compatibles con los del coronavirus: fiebre, cefalea, vómitos, debilidad muscular, malestar general, habían asegurado investigadores. Ante esto se le realizó el hisopado correspondiente para determinar si tenía la enfermedad y este jueves por la tarde se confirmó que el resultado dio negativo.
Según informaron fuentes allegadas a la causa, el análisis corroboró que el joven no estaba contagiado. La muestra de saliva se le extrajo en la morgue del Departamento Judicial de Lomas de Zamora y luego se llevó a los laboratorios de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
La trama comenzó después de que los investigadores hallaran el cuerpo y cotejaran su reciente historial clínico, en el cual, según dijeron a Infobae, el preso desde el día que comenzó la cuarentena había presentado una serie de síntomas que resultaban similares a los del COVID-19. Por esto, pidieron que se le realice el hisopado correspondiente para descartar todas las hipótesis.
El joven había sido detenido acusado de un homicidio: se encontraba arrestado en el lugar desde octubre pasado. Había sido hospitalizado en tres oportunidades durante su detención, las tres internaciones en el mes de marzo.
La alarma fue inmediata: un detenido posiblemente infectado en una comisaría sobrepoblada parecía ser sinónimo de contagio, el primero tras las rejas en el país. Así, la Justicia de La Matanza comenzó una investigación, a cargo del fiscal Claudio Fornaro, con un test al cuerpo para determinar la presencia del virus.
Sin embargo, esta tarde se desechó esa posibilidad. Después de ser descartada aquella opción, los forenses procederán a realizarle la autopsia correspondiente para determinar la causa de su muerte.
La primera vez que Alarcón fue hospitalizado por presentar aquellas dolencias fue el 22 de marzo. Había sido enviado a la Clínica “Sakamoto”, en Rafael Castillo, en La Matanza. Luego, el 28 y el 31 de ese mes, también tuvo que ser hospitalizado en el Policlínico de San Justo con patologías similares.
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